El desarrollo económico de México se encuentra en un momento crucial. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) ha publicado su estudio anual sobre el país norteamericano en el que señala que para mantener el impulso económico, el Estado necesitará encontrar nuevas fuentes de recursos, a través de los impuestos, y reducir significativamente la desigualdad entre los mexicanos. La OCDE también ha rebajado su previsión de crecimiento para 2019 y la ha situado en 1,6% del PIB, cuando anteriormente la había estimado en 2%. José Ángel Gurría, secretario general de la organización, ha entregado el estudio al gobierno mexicano y ha señalado que entre las principales preocupaciones sobre el futuro de México también está la cuantiosa deuda de Petróleos Mexicanos (Pemex).
El reporte titulado Estudio Económico de la OCDE para México señala que el gobierno de Andrés Manuel López Obrador debe considerar en el mediano plazo emprender una reforma fiscal. Entre sus sugerencias está ampliar la base gravable del Impuesto al Valor Agregado (IVA) para eliminar algunas exenciones o tasas reducidas por las que la Hacienda mexicana no consigue ampliar su recaudación. “Se sugiere que una reforma integral de la tributación y los subsidios debería procurar ampliar la base gravable del Impuesto al Valor Agregado, al reducir exenciones y eliminar las tasas reducidas, al tiempo que se compensa a los hogares de bajos ingresos con subsidios focalizados”, explica el documento.
Además, apunta que el Impuesto sobre la Renta (ISR) podría incrementar progresivamente al “bajar el umbral de ingresos para la tasa máxima y recortar aún más las deducciones fiscales”. La OCDE reconoce que la reforma fiscal emprendida en 2014 por Enrique Peña Nieto cumplió con la función de obtener recursos para el Estado distintos de los relacionados con el petróleo, pero que México continúa siendo uno de los países que menos recauda en América Latina y el Caribe. “La reforma hizo poco para reducir la desigualdad en términos del ingreso disponible”, señala el estudio. La recomendación pone en un dilema a la administración de López Obrador, quien desde su campaña prometió a los mexicanos que no subiría los impuestos.
Entre los problemas que impiden el crecimiento económico en México, la organización ha detectado el estancamiento de la productividad, el bajo rendimiento educativo, el débil Estado de derecho, los obstáculos a la competencia y la economía informal —que es de un 60%—. “Es preciso trabajar en garantizar la permanente fortaleza y autonomía de las nuevas autoridades de competencia y los reguladores sectoriales”, se lee en el estudio. También apunta que la inversión extranjera es moderada debido a la incertidumbre política. Gurría ha explicado que la deuda de Pemex debe atenderse inmediatamente ya que su crecimiento puede afectar a a la calificación de la deuda soberana.
López Obrador se ha mostrado optimista sobre el desarrollo económico de México y ha asegurado que durante su gobierno el crecimiento será de hasta 4%. Cuestionado esta mañana sobre los últimos datos económicos, el presidente mexicano ha dicho que está convencido de que la economía crecerá. "No bien, requetebién", dijo. Sin embargo, en el primer trimestre de 2019 el PIB creció un 0,2% respecto al mismo periodo del año anterior, según la información publicada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).