México
Al encabezar la ceremonia conmemorativa de entrada en vigor del Nuevo Sistema de Justicia Penal, al que calificó como la mayor transformación institucional en los últimos 100 años, el presidente Enrique Peña Nieto pidió hacer de éste "el emblema de un país comprometido con la legalidad y el estado de derecho".
En el evento realizado en el primer minuto de este sábado en el Altar a la Patria en el Bosque del Chapultepec, firmó con los titulares de los poderes Legislativo y Judicial un acuerdo para dar seguimiento a la aplicación de esta reforma.
"Hago un respetuoso llamado a los poderes Legislativo y Judicial, a los gobiernos locales, a la academia y a las organizaciones de la sociedad civil para mantener la causa de la justicia penal como una prioridad nacional", señaló.
Puntualizó que hoy se cuenta con nuevas leyes, instituciones y espacios físicos para transformar la justicia penal, pero que lo más importante es que el elemento humano asuma la trascendencia del cambio para hacer que el derecho logre su máximo fin, que es brindar justicia.
"Hagamos de este nuevo sistema el emblema de un país comprometido con la legalidad y el estado de derecho", exhortó.
Destacó que en este esfuerzo ha quedado acreditado que los cambios estructurales que requiere México solo pueden concretarse "con una auténtica visión de Estado, yendo más allá de diferencias políticas, calendarios electorales y periodos de gobierno"
Señaló que en los últimos ocho años se han invertido más de 21 mil millones de pesos en la implementación de la reforma y que 89 por ciento de ellos fueron ejercidos en su administración.
El Presidente resaltó que el mérito de la transformación es colectivo, por lo que reconoció el trabajo del Consejo de Coordinación para la Implementación del Sistema de Justicia Penal, del Legislativo para aprobar los ordenamientos secundarios, así como a las procuradurías y fiscalías.
Dijo que para normar este nuevo modelo se crearon y reformaron 21 leyes federales y nacionales, además de que se modificaron más de 350 leyes locales
El mandatario encabezó la firma del acuerdo entre los tres Poderes de la Unión para la Consolidación del Sistema de Justicia Penal y canceló el timbre postal Nuevo Sistema de Justicia Penal, en tanto que el presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, Luis María Aguilar dio, justo a la media noche, el malletazo simbólico de la conclusión de la implementación de la reforma de justicia penal.
El ministro consideró que "mal haríamos en suponer que hemos terminado, qué engañoso sería decirle a los gobernados que el sistema de justicia ya está resolviendo todos sus problemas".
Sin embargo, advirtió, "no debemos, en modo alguno, echar las campanas al vuelo, una sociedad que no cambia muere; la esencia de la sociedad es el movimiento".
El secretario de Gobernación, Miguel Ángel Osorio, dijo que se trata de un cambio que requería claridad de propósitos y en el legado que significa para el país la transformación histórica lograda.
Aseguró que ésta es una gran oportunidad para contar con un sistema que actúe de manera efectiva y transparente para castigar a los culpables y proteger a las víctimas, que pase de los cambios en la ley a los cambios en las instituciones.
En su intervención, el jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, dijo que el país vive un proceso de recomposición institucional y que ésta es una de las transformaciones más profundas de la vida jurídica y convivencia social del México moderno.
Señaló que se trata de un hecho histórico y que es necesario aplicar de manera plena y total la reforma en todo el territorio nacional, y reconoció a los gobiernos estatales el esfuerzo realizado.
Todo cambio, agregó, tiene un periodo de correcciones y mejoras, por lo que confió en que exista un seguimiento puntual de la consolidación que permita un sistema de justicia eficiente.
Dijo también que es necesario seguir trabajando juntos para alcanzar un modelo que sea útil para la gente, que sirva a los más vulnerables y dé respuesta "a los más enojados" por la impunidad.
El presidente de la Mesa Directiva de la Cámara de Diputados, Jesús Zambrano, señaló que ya se ha comenzado a criticar al sistema y poner en duda su eficacia, pero "es infinitamente superior y mejor a lo anterior", por lo que es necesario que el sistema dé los resultados de justicia que el pueblo necesita y espera, para así superar la crisis de credibilidad de las instituciones de la República.
El presidente de la Mesa Directiva del Senado, Roberto Gil, se pronunció por cuidar el sistema de justicia, dando seguimiento a su implementación para corregir a tiempo las leyes y su forma de operar.
Mientras que el presidente del Tribunal Superior de Justicia de la Ciudad de México, Édgar Elías Azar, afirmó que con la entrada en vigor de la reforma de justicia penal se cumplió puntualmente con un compromiso de Estado.
Luis María Aguilar da el malletazo de entrada del nuevo modelo ante el presidente Enrique Peña Nieto. (Octavio Hoyos)
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