El 20 de marzo, la Oficialía Mayor de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) difundió el comienzo del procedimiento de licitación pública internacional para los institutos nacionales, hospitales de alta especialización, órganos desconcentrados y unidades de la Secretaría de Salud, así como de los institutos Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (Issste), de Marina, Defensa y Petróleos Mexicanos.
Pero a partir del 22 de ese mes, la Secretaría de Salud realizó modificaciones constantes tanto para publicar el proyecto como la convocatoria definitiva de las licitaciones, bajo el argumento de que “se tuvo una extraordinaria respuesta”, 312 asistentes presenciales y hasta 304 personas conectadas virtualmente, que, dijo, obligan a ampliar plazos de investigación de mercado.
En diversos comunicados, la Ssa difundió que la investigación de mercado se daría a conocer el día 8 de abril y que el plazo para presentar las cotizaciones se extendía hasta el 10 de ese mes a las 6 de la tarde. Nada de ello sucedió.
Para el 17 de abril la dependencia justificaba que, derivado “de la ampliación para la recepción de cotizaciones otorgada a los interesados en participar”, el proyecto de convocatoria se realizará hasta el 26 de ese mes.
Llegó el día 26 y la Ssa informó que continuaba “con el proceso de presentar cotizaciones de la investigación de mercado”, y que sería el 29 cuando se publicaría el proyecto de convocatoria para la licitación.
A principios de mayo finalmente se difundió el proyecto de la convocatoria. Fue cuando la SHCP aseguró que lanzaría la definitiva el día 7 de este mes, pero al final la postergó hasta el 23. Tampoco cumplió ese día.
Hacienda pretendía dar del 10 al 21 de junio el fallo sobre las empresas a las que compraría 3 mil 887 claves de medicamentos y material de curación del cuadro básico de salud, y a más tardar el 3 de julio firmar los contratos y pedidos de la licitación PC-012000991-E64-2019.
“Hay resistencias”
De acuerdo con la titular de la Oficialía Mayor de Hacienda, Raquel Buenrostro, “existe” resistencia de la industria farmacéutica hacia este nuevo modelo de compras consolidadas del gobierno: “No es una ocurrencia, corresponde a prácticas internacionales y con lo cual México tendrá mayor eficiencia en el gasto.
“Concentrar entre 70 y 80% del gasto del gobierno federal en un periodo de dos a tres años permitirá ahorros de entre 20 y 30% de todas las compras, equivalente a 200 mil millones de pesos”, según la Oficialía Mayor.
Patrick Devlyn, presidente de la Comisión de Salud del Consejo Coordinador Empresarial, explicó que es fecha que no quedan claros los precios máximos de referencia ni los criterios de la Ley de Adquisiciones para competir y ganar las licitaciones de las dependencias participantes.
Hacienda, dijo Devlyn, está solicitando diversos requerimientos que, al final, “ocasionarán que diversas claves se declaren desiertas. Llegaremos al segundo semestre del año con un desabasto generalizado de medicamentos e insumos, lo que pondrá en severo riesgo la salud y la vida de los ciudadanos”.