Si bien se “nota una preocupación por parte del gobierno del estado en materia de seguridad, en el sentido de que se quiera limitar el uso de autos”, bajo esas condiciones, es equívoca, “porque el gobierno del estado tiene signado un pacto federal, donde las entidades federativas contribuyen a la regulación del tránsito”.
Asimismo, el abogado puso como ejemplo que, para que los carros o motocicletas de la ciudad de México puedan trasladarse a Guerrero, “tienen que cruzar Morelos”. Por tanto, con base en ese acuerdo nacional, existe una libertad.
Sin embargo, si en este momento, el estado ordena limitar la circulación si no se portan las placas correspondientes, “… sería una violación a ese pacto federal”.
En ese mismo sentido, agregó que, de acuerdo con el artículo 115 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, “toda la cuestión de tránsito le corresponde al municipio” y, en tal caso, éste es el que “debe poner las reglas en la materia”.
Paredes Sotelo añadió que las demarcaciones municipales son las que deben modificar, en dado caso, sus normatividades respectivas; empero, la alcaldía de Cuernavaca no se ha “pronunciado al respecto”. En torno a ello, es el estado el que “debe proponer a los municipios” que hagan modificaciones. Al momento, se cuenta con 32 reglamentos, que tendrían que ser transformados, para cumplir con “las expectativas que quiere el gobierno del estado”.
Además, expuso que, para concretar lo antes descrito, se necesita de una labor legislativa: “No es hacerlo por hacerlo”. Consideró que esto no va a ser rápido. E, insistió: “siento que sería inconstitucional”.
“Si yo voy a comprarme un carro nuevo, no me van a dar placas; entonces, tendría que salir de la agencia amparado, para que no me detengan o, bien saco mi permiso, para circular sin placas y, a la vez mi amparo”, acotó, simulando una situación que podría suscitarse.
Recalcó que es una “buena medida”, pero, encaminada a no permitir que circulen carros con permisos de Guerrero.