El valor de la construcción completó un año en contracción. Sólo en junio pasado se hundió 7.8 por ciento respecto del mismo mes del año pasado y 0.6 frente a mayo de 2019, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El deterioro que ha visto la actividad implicó que en cada uno de los pasados 12 meses la contracción promedio fuera de 5.31 por ciento anual. Además, que se hayan perdido 28 mil 448 puestos de trabajo en el sector, es decir, 5.4 por ciento.
De acuerdo con el Inegi, el valor de producción del sector fue de 29 mil 919 millones de pesos en junio. Pese al deterioro que le ha circundado desde mediados de 2015, la actividad aún se cuenta entre las cinco de más peso en la economía mexicana. Con un valor total de un billón 79 mil 690 millones de pesos, equivale a 7.5 por ciento del producto interno bruto (PIB).
Además de la merma en el valor de producción, que restó 2 mil 536.9 millones de pesos al comparar junio de 2018 con el mismo mes de este año, también los efectos se reflejan en puestos de trabajo que se han perdido por igual entre los reconocidos por la empresa para la que laboran (-5.3 por ciento) y los no dependientes (-5.5 por ciento).
Los ingresos
El Inegi dio cuenta de que las remuneraciones promedio de los trabajadores de la construcción son de 8 mil 48 pesos, cifra que es 13 pesos mayor a la de junio de 2018, pero que a razón de la inflación su valor real ha caído 0.2 por ciento. El número de horas laboradas también se explicó por una caída de cerca de 7.1 por ciento.
En cifras originales, la mayor pérdida del sector se cuenta primero en trabajos especializados para la construcción, que se desplomó 16.3 por ciento. Le siguió la edificación, con 112.4, y en menor medida se ubicaron las obras de ingeniería civil, con la reducción de 1.4.
En la comparación que se hace mes tras mes, el valor de la construcción sólo creció en diciembre de 2018 y en enero pasado, pero de ahí en fuera mantuvo su tendencia negativa en el último año.