La llamada Cuarta Transformación planea echar a andar el gobierno federal en 2020 con 10 mil servidores públicos menos que los registrados al final del sexenio de Enrique Peña Nieto, así como generar ahorros que superan los 20 millones de pesos tan sólo en el pago de remuneraciones a los titulares de las diversas instituciones.
Las 21 dependencias de la administración pública y la nueva Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana trabajarán con 888 mil 257 burócratas a partir de enero, de acuerdo con el proyecto de Presupuesto de Egresos de la Federación 2020 que presentó Arturo Herrera Gutiérrez, titular de Hacienda, el domingo pasado.
Se trata de una disminución de 10 mil 272 plazas con relación a las 898 mil 529 reportadas en 2018.
La Secretaría de Gobernación (Segob) es la dependencia gubernamental más afectada con la propuesta, porque su plantilla se reduce de 80 mil 121 empleados en 2018 a 11 mil 90 en 2020, aunque 68 mil 376 plazas fueron trasladadas a la recién creada Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, entidad encargada de convocar a la Guardia Nacional.
En las secretarías de Energía (Sener) y la de Bienestar se despedirán a dos de cada tres trabajadores. El personal de la primera disminuye de 26 mil 393 a 7 mil 444, y el de la segunda de 15 mil 302 a 5 mil 67 puestos. Esta última dependencia se encarga de implementar programas prioritarios del gobierno, como las pensiones para adultos mayores y las becas para que jóvenes se incorporen al campo laboral.
La transición a la Cuarta Transformación conlleva también una reducción del personal en las secretarías de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), así como en la de Comunicaciones y Transportes (SCT).
Dependencias favorecidas. De las 22 dependencias, cinco podrán contar con más personal el siguiente año, principalmente la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), cuya nómina se incrementa de 215 mil 236 a 230 mil 69 elementos, luego del traslado de parte de su personal a la Guardia Nacional.
La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural (Sedar) dispondrá de 30 mil 353 empleados en 2020 frente a los 22 mil 664 de 2018, mientras que el personal de la Secretaría de Marina aumenta de 66 mil 614 a 68 mil 725 elementos.
El director general de la consultoría Inteligencia Pública, Marco Cancino, expresó preocupación por el recorte de personal y la fuga de talento en diversas dependencias, porque se debió hacer antes un análisis minucioso de la estructura laboral.
“Sabemos que existían duplicidades y aviadores, pero el recorte debió responder a un análisis para no comprometer la viabilidad de los programas presupuestarios del siguiente año, porque en un principio se puede poner en aprietos la ejecución de muchos de éstos”, opinó el especialista.
Cancino anticipa más despidos de servidores públicos durante 2020, si la recaudación del gobierno resulta insuficiente para financiar sus programas prioritarios.
Ahorros en salarios. En la búsqueda de consolidar la austeridad republicana, el gobierno federal va a ahorrar 20 millones 469 mil pesos en el pago de remuneraciones a los titulares de cada dependencia con relación a 2018.
Contrario a lo esperado, el principal ahorro no proviene del ajuste salarial al presidente Andrés Manuel López Obrador, sino de la modificación a las remuneraciones del Fiscal General de la República, cuyas percepciones brutas anuales serán por 2 millones 266 mil pesos en 2020, contra los 3 millones 491 mil pesos que ganaba el entonces Procurador General de la República en 2018, lo que equivale a un millón 225 mil pesos menos.
El presidente López Obrador percibirá 2 millones 400 mil pesos, mientras que Enrique Peña Nieto obtuvo 3 millones 551 mil pesos durante el último año de su administración, una diferencia de un millón 151 mil pesos.
Muchos de estos ahorros pueden parar en transferencias a programas del gobierno y en el financiamiento de proyectos como la construcción de la refinería de Dos Bocas y el aeropuerto de Santa Lucía, opinó Cancino.
“La reducción de salarios parece mandar el mensaje político de que no puede haber gobierno rico y un pueblo pobre, pero en realidad los ahorros lucen insignificantes frente al tamaño del presupuesto de la Federación”, expuso el analista.