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KRONOS: La mafia apadrina a los políticos

Desde hace varios años en Morelos los padrinos políticos de gobernadores, senadores, diputados, presidentes municipales, regidores, delegados y ayudantes municipales han pasado al olvido, ahora el control los han asumido los grades capos de las mafia que se disputan, a sangre y fuego, el poder tras apoderarse de los principales cargos públicos y de gobierno en la entidad.

No hay liderazgo político, ni tampoco empresario, hombres de negocios, activista, dirigente social o gobernante que no cuente con el respaldo o bendición de un padrino mafioso.
Sin su bendición, el futuro político inmediato de cualquiera de su tipo, podría quedar frustado en corto tiempo.

Las evidencias y revelaciones son más que suficientes, para demostrar esta lamentable situación que impera en la entidad, pues de acuerdo con fuentes de inteligencia militar y el propio coordinador de la Comisión Estatal de Seguridad, José Ortiz Guarneros, una gran mayoría de los 36 alcaldes son operadores o recibieron el respaldo financiero de los lideres de los distintos carteles de las drogas y organizaciones del crimen organizado que operan en el estado.

Lo anterior, debido a la grave descomposición social y desprestigio de los partidos políticos tradicionales, hablase del PRI, PAN, PRD, PT, Movimiento Ciudadano y PT que han abierto sus puertas a la delincuencia y, buena parte de sus cuadros y militancia son encabezados por padrinos de carteles, organizaciones y células que controlan el crimen organizado.
Casos hay muchos y sobran los dedos de la mano para referirse algunos de ellos que han convertido a esos partidos políticos en auténticos carteles o agrupaciones del crimen, por la forma de operar de algunos de sus lideres.

En su más reciente conferencia de prensa, antes de encabezar la marcha por la paz, el obispo de la Diócesis de Cuernavaca, Ramón Castro y Castro, reveló que 18 alcaldes de los 33 Ayuntamientos de la entidad, son amenazados o tienen nexos con bandas del crimen organizado, principalmente, en la zona Oriente y sur Poniente del Estado, territorio de influencia del grupo delictivo Los Rojos y Guerreros Unidos o Gente Nueva, como se conoce a esa célula delictiva que ya también domina la capital del estado y los municipios aledaños como Cuautla y Jiutepec; mientras que Huitzilac, se cuece aparte, pues ahí se albergan distintos grupos criminales ligados al CJNG, encabezado por Nemecio Oseguera “El Mencho”, por su cercanía con el Estado de México.

Con la captura y consignación al penal federal de Puente Grande Jalisco de Santiago Mazarí “El Carrete”, líder de Los Rojos quedó al descubierto toda la red de complicidades y los nexos de presidentes municipales y ex alcaldes, así como regidores, diputados locales, dirigentes de los distintos partidos políticos y hasta funcionarios de alto nivel del Gobierno estatal que encabeza el ex americanista Cuauhtémoc Blanco Bravo.

Como caso particular es el de Enrique Alonso Plasencia, ex alcalde de Tlaquiltenango y actual titular del Instituto de Desarrollo y Fomento Municipal del Estado de Morelos (IDEFOM),

El referido funcionario público presuntamente forma parte de la estructura criminal y tiene posición jerárquica como uno de los principales operadores de la organización denominada Los Rojos de Santiago Mazarí
El Carrete o El Señor de los Caballos como se conoce al capo mafioso procesado por delincuencia organizada, delitos contra la salud y secuestro, al igual que sitio o padrino político Alfonso Miranda Gallegos, ex alcalde de Amacuzac, preso actualmente en un penal federal de Durango.

La delicadeza de este asunto, obligó al propio gobernador Cuauhtémoc Blanco a solicitar a las autoridades del gobierno federal de Andrés Manuel López Obrador, iniciar una investigación a fondo sobre el titular del IDEFOM, Enrique Alonso Plasencia, por sus presuntos nexos con la delincuencia organizada.

Una indagatoria realizada por inteligencia militar y la Comisión Nacional de Seguridad Ciudadana de Alfonso Durazo, hace referencia a los nexos de Alonso Plasencia, con el grupo criminal Los Rojos y su posición en la estructura delictiva como principal operador de los delitos de secuestro, extorsión, cobro de derecho de piso, lavado de dinero y tráfico drogas y armas.

Junto con su hermano “El Capi” y esposa de nombre Laura N., actualmente presa y procesada en una cárcel femenil de la entidad por el delito de secuestro, Enrique Alonso Plasencia, ex candidato a diputado local por el PT, mantienen el control y el modus operandi de todos esos ilícitos dentro de la organización delictiva, en donde ocupaba el 4to lugar, luego de la captura de su compadre Santiago Mazarí también apodado en el bajo mundo del hampa como El Sonoita o El Ocho.

En la misma situación se ubica el ex alcalde de Amacuzac, Alfonso Miranda Gallegos, quien por azares del destino logró ganar las pasadas elecciones del 2018 como candidato a presidente municipal de ese mismo Ayuntamiento, por la Coalición Juntos Haremos Historia, misma con la que AMLO resultó triunfador a la Presidencia de la República.

Sin embargo, el también ex diputado local, no logró ocupar por segunda ocasión el cargo de presidente municipal de esa localidad, debido al proceso judicial iniciado en su contra días antes de las elecciones, tras ser enviado a prisión por los delitos de secuestro y delincuencia organizada.

Actualmente se encuentra confinado en una prisión federal del Estado de Durango, en espera de ser sentenciado. El caso más reciente es que desde ese Centro de Readaptación Social el tío político de Santiago Mazarí, realizó la inauguración de obras públicas en una comunidad de Amacuzac y se dio el lujo de realizar el tradicional grito durante las pasadas fiestas patrias en esa localidad.

Cabe destacar que en ese mismo lugar, durante el mes septiembre pasado, efectivos de la Procuraduría de Investigaciones contra la Delincuencia Organizada de la Fiscalía General de la República (FGR), detuvieron a su hijo Gabriel Miranda “El Gaby”, quien desempeñaba el cargo público de Secretario del Ayuntamiento. Simultáneamente, también por aquella zona, fue captura del hijo de “El Carrete”, quien habría tomado de la organización delictiva tras la captura de su padre Santiago Mazarí, el pasado 1 agosto.

Casos como los anteriores, son diversos y los hay en todos los niveles y cargos públicos de los gobiernos estatal y municipal, además del Congreso local, en donde casi la mitad de los diputados curuleros obtuvieron su representación con la bendición y visto bueno de los distintos padrinos de la mafia o carteles de las drogas; hablése de Los Tilos que controlan JIUTEPEC y municipios aledaños. Llámese Santiago Mazarí El Carrete o Abel Maya García que también sus chicharrones truenan y tiene gran influencia en Ayuntamientos de la zona centro de la entidad, además controla algunos funcionarios del gobierno estatal que encabeza el ex futbolista Cuauhtémoc Blanco Bravo, a través de su relación con el jefe de la Oficina de la Gubernatura, JOSE MANUEL SAENZ RIVERA.

Sobre este tema bien se podría escribir todo un libro de grueso volumen, pero en la próxima entrega de este reportaje les daremos a conocer más nombre de servidores públicos y su relación o nexos con los padrinos y capos de las distintas bandas del crimen que se disputan el control político de la entidad.

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