Inversiones del sector privado en el rubro energético, hasta por 100 mil millones de dólares –cifra superior al saldo de la deuda externa pública–, fueron anunciados ayer por Alfonso Romo Garza, jefe de la Oficina de la Presidencia y enlace del titular del Ejecutivo, Andrés Manuel López Obrador, con el empresariado nacional.
Dio a conocer que a más tardar en tres semanas el sector privado y la administración pública presentarán un programa de inversión para el sector energético, que incluirá alianzas de Petróleos Mexicanos (Pemex) con firmas privadas, las cuales estarán sustentadas en contratos especiales. Indicó que serán 137 proyectos, "incluso más", y su principal objetivo será impulsar los niveles de inversión para detonar el crecimiento económico.
El gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador, que se inició el primero de diciembre de 2018, dejó en suspenso la licitación de nuevos campos petroleros a empresas privadas, proceso conocido como "rondas", así como la posibilidad de que Pemex se asociara con particulares para la explotación de yacimientos, práctica llamada farmouts.
"A finales de febrero, a más tardar, aterrizaremos los proyectos del sector privado. Son 137 proyectos que tienen un valor de entre 95 y 100 mil millones de dólares", adelantó Romo en declaraciones a la prensa después de participar en el foro Energy México 2020.
Para efectos comparativos, 100 mil millones de dólares equivalen a alrededor de siete puntos porcentuales del producto interno bruto (PIB) y superan ligeramente el saldo de la deuda externa del gobierno federal, que en noviembre pasado, dato disponible más reciente, fue de 98 mil 900 millones, de acuerdo con la Secretaría de Hacienda.
Romo Garza adelantó que esta semana comenzarán mesas de trabajo con la Secretaría de Energía, Pemex, Comisión Federal de Electricidad y Centro Nacional de Control de Gas Natural para definir en qué sectores se aterrizarán los proyectos del sector privado.
"Los planes podrían reducirse o ampliarse, porque estamos recibiendo más. En la primera reunión obtuvimos 137, pero vienen más, porque esto no puede terminar. Es una rueda de la fortuna. Estos son los primeros, pero ya hemos recibido muchos", declaró.
Afirmó que la iniciativa privada del país y el gobierno federal tienen la intención de participar en cualquier tipo de proyecto de inversión, desde temas de energías limpias hasta farmouts con Pemex.
"Son proyectos de todo tipo. De energías limpias, infraestructura, almacenaje, gasoductos. Todos los sectores. Si queda fuera exploración y producción, eso lo vamos a definir en las próximas tres semanas, pero sí va a haber contratos especiales en caso de que no se tengan recursos, de acuerdo con una fórmula en la que gane Pemex, pero eso no lo tenemos todavía claro."
El jefe de la Oficina de la Presidencia puntualizó que, pese a no ser experto en el sector energético, el fin de dicho plan es dar total certidumbre a las inversiones y garantizar el crecimiento económico del país.
"La idea es dar certidumbre a la inversión. Tenemos que tener certidumbre legal y normativa, y eso es lo que vamos a trabajar. No vamos a parar nada que afecte el crecimiento del país. Vamos a incluir todo y en las próximas tres semanas vamos a definir todo", subrayó.
El CCE no da "por perdido" ningún proyecto
Por su parte, Carlos Salazar Lomelín, presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), aseveró, después de participar en el mismo foro, que la iniciativa privada no ha dado "por perdido" ningún proyecto de inversión que se pueda ejecutar en el sector energético, como la reactivación de las rondas petroleras.
Expuso que, hasta el momento, el sector privado ha tenido diversos acercamientos con la administración pública.
Sobre los proyectos mencionados por Romo y el monto de inversión, precisó que los planes ya fueron entregados.
"Los criterios son claros. En el sector eléctrico, 54 por ciento de inversión será para el Estado, 46 por ciento para privados. Tenemos mucho campo dónde invertir. En el sector petrolero está claro en qué áreas, pero básicamente que 80 por ciento va al sector público y 20 por ciento al privado."
Explicó que para las inversiones que se realizarán dentro de Pemex, la IP tendrá participación en las coquizadoras (plantas para transformar hidrocarburos pesados en otros más rentables) que están en las refinerías que operan en el país.