El Presidente Andrés Manuel López Obrador se negó ayer a transparentar los nombres de los 75 empresarios que entregarán mil 500 millones de pesos al Gobierno federal por la compra de boletos para la rifa con motivo del avión presidencial.
A pregunta expresa, el Mandatario advirtió que no está obligado por ley a revelar la identidad de los inversionistas, aún cuando existe el riesgo de que se conviertan en contratistas de su Administración.
“No vamos a darle beneficio a nadie fuera de la ley, aquí no hay preferencias, no hay influyentismo”, aseguró.
– ¿Y pago de favores?, se le preguntó en la conferencia matutina en Palacio Nacional.
“No, es que ese es el problema, nos confunden. Yo no soy Salinas, si calienta eso; no vamos nosotros, ya parece, llevamos tantos años de lucha, de mantener nuestros ideales, nuestros principios, para caer en el influyentismo”, dijo.
– ¿No sería mejor transparentar los nombres de quienes van a aportar?, se le insistió.
“Es que no tenemos por qué hacerlo legalmente y queremos, también, protegerlos. Les dije que si ellos deseaban que se dieran a conocer los nombres lo hacíamos, si no, es como comprar boletos de la Lotería, en el anonimato”, respondió.
López Obrador también negó que el “pase de charola” a los empresarios pueda representar una violación a la Ley General de Responsabilidades Administrativas, que prohíbe a los funcionarios públicos solicitar dádivas a cambio de beneficio propio o para terceros.
“Es totalmente legal. No sé por qué vaya a ser ilegal. Pero primero hay que ver: ¿qué es dádiva? Si esto es una dádiva, habría que ver los fines, porque no es para beneficio personal. (Es) para beneficio público, beneficio social”, señaló.
El Presidente adelantó que los mil 500 millones de pesos que pagarán los empresarios no serán deducibles de impuestos y negó que se trate de un “sablazo” a la iniciativa privada, al afirmar que fue una cooperación voluntaria.
Acusó a REFORMA de quedarse callado y hasta aplaudir la compra del avión presidencial.
“El periódico REFORMA, de veras lo tengo que decir, porque se quedan callados cuando compran el avión, hasta lo aplauden. Ahora buscamos vender el avión para que ese dinero le sirva a la gente, se convierta en equipos médicos y en vez de decir: ‘esto es inédito’, dicen: ‘sablazo, extorsión, influyentismo'”, reclamó.
“Vamos a estar debatiendo sobre esto como seis meses, porque la rifa es el día 15 y va a venir el avión, y vamos a invitar al REFORMA a que haga un reportaje y que nos digan si estuvo bien que se comprara el avión”.