Todos los órdenes de gobierno deben escuchar a los movimientos feministas y entablar un diálogo con las mujeres para acelerar los mecanismos que permitan garantizar la igualdad, señala Belén Sanz Luque, representante de ONU Mujeres en México.
De cara a las manifestaciones del 8 de marzo y el paro del día siguiente, Sanz Luque hace un llamado a la sociedad y al gobierno a escuchar el hartazgo de las mujeres por los años de violencia e impunidad.
“Las mujeres están hartas, enojadas; son demasiados años de impunidad, desigualdad y violencia”, asegura.
En entrevista con EL UNIVERSAL, pide no enfocar la discusión hacia las pintas y destrozos que pudiera haber en el marco de la marcha del 8 de marzo y enfocarse en el mensaje y en las exigencias en lugar de desviar la atención a las formas en las que, indicó, se manifiesta la rabia, la desesperación y el hastío.
Sobre el paro del 9 de marzo, señaló que es importante participar para protestar por la situación de las mujeres en México y también por solidaridad.
Espera que el acto vaya más allá de lo simbólico y que las instituciones públicas y privadas asuman compromisos para garantizar la equidad en sus procesos.
¿Qué efecto tiene que el Presidente diga que hay feministas disfrazadas de conservadoras y que descalifique las movilizaciones del sector?
—Es muy importante escuchar a las mujeres que están hablando y que están pidiendo un “¡basta ya!”, [además de] acceso a la justicia y el fin de la impunidad. Es una oportunidad [para] generar diálogo con las mujeres y sus movimientos.
Ese es nuestro reconocimiento del movimiento feminista. Las mujeres están hartas, están enojadas, porque son demasiados años de impunidad, desigualdad y violencia.
Nos parece muy importante que el gobierno de todos los niveles escuche a estas voces, entre en un diálogo [con ellas] y pueda acelerar los mecanismos que permitan garantizar la total igualdad.
¿Es un llamado al Presidente a dialogar con las mujeres?
—Es un llamado a toda la sociedad y a todos los niveles de gobierno.
¿Se justifican las acciones vandálicas durante las protestas?
—Las mujeres y las jóvenes están en la calle para dar un fuerte mensaje de exigencia a la sociedad: [ya] no puede permitir estos altísimos niveles de violencia e impunidad.
Es importante no centrarse ni desviar la atención hacia las formas en las que se manifiesta esta rabia, sino irnos a las causas que la motivan. Ahí es donde debemos enfocarnos, y en la medida en que lo hagamos y se dialogue con las mujeres que se están manifestando, podremos generar un cambio.
¿Qué opina sobre la reciente propuesta de eliminar el tipo penal de feminicidio?
—[Esta categoría legal] es un avance muy importante en los sistemas judiciales de todos los países y, en el caso mexicano, en el Código Penal. No sólo es un avance, sino que permite atender el problema de la impunidad. Es muy importante garantizar que esté presente en el Código Penal Federal y que todos los de los estados se armonicen con él.
Se debe garantizar que este tipo penal no sólo está presente, sino que se profundice su implementación por medio de todos los protocolos.