Algo que nunca se menciona en las conferencias COVID es que las cifras que se dan están nutri-das de casos viejos, a veces datos con dos o tres semanas de rezago. Se ha comenzado a dar informes con 300 muertes “nuevas” cada día. Aún no se llega a esa cifra, aunque es previsible que se alcance.
Los datos de Salud provienen directamente de los estados y del sistema hospitalario federal.
El asunto es sencillo de decir, las cifras que brinda López-Gatell cada noche no reflejan el impacto fatal diario del COVID-19 en México; actualmente el subsecretario de Salud alude a 300 decesos nuevos cada día, pero en realidad se refiere a “casos nuevos informados”, es decir, las personas incluidas en esos datos murieron en su gran mayoría días o incluso semanas antes. Si bien es una técnica de seguimiento estadístico válida, la impresión general que se da en las conferencias es que se lleva un seguimiento diario, en tiempo real, lo que no está sucediendo.
En realidad, México está pasando, en efecto, por el momento de mayor impacto fatal del COVID, pero no se registran 300 decesos diarios, sino 175, una cantidad en torno a la que se estacionó el registro entre el 1 de mayo y el 10 de mayo. Los datos oficiales del periodo entre el 11 de mayo y la fecha actual lucen claramente incompletos y existe un efecto “fin de semana” en el que particularmente los domingos se cuenta con menos información actualizada sobre e impacto fatal.
Ayer, por ejemplo, las cifras de contagio y muertes da un bajón notable sin que se haga mención de ello. De reportar unos días 300 muertes nuevas cada 24 horas, se pasa a apenas algo más de 100 muertes este domingo. Pero el hecho no escomentado ni para bien ni para mal durante la conferencia.
Brasil y Rusia. Éstos son dos países que, al igual que México, tuvieron tiempo para valorar el impacto del COVID-19 en Europa. El recorrido del COVID-19 por el mundo dio la impresión de avanzar de oriente, desde China, hacia Occidente, por lo que la región de las américas fue la última en ser golpeada. Dado el desface de fechas, es necesario hacer un ajuste artificial para emparejar el impacto faltal del COVID y hacerlo comparable entre países.
Eso es lo que se muestra en una de las gráficas que acompañan esta líneas (Equiparación). Para todos los países, el día 1 esttá marcado por la primera muerte de COVID-19. En ese esquema, Italia, Reino Unido y España quedan claramente como curvas que rebasaron las mil muertes en un día y cuya característica principal es que hubo una gran aceleración en el número diario de muertes en la primera etapa. Eso es lo que la autoridad mexicana quiso evitar, aplanando la curva.
Brasil está adelantado a México, con un comportamiento parecido, pero su curva aplanada ya rebasó los 800 muertos en una sola jornada.
Si México logra frenar el número de muertes en 300 o menos, sería un éxito relativo, pero empezará entonces a preocupar el número de días consecutivos en los que se registre esa cantidad de decesos. Tener 10 días consecutivos de 300, equivale a 3 mil muertes.