Durante la visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a Cuernavaca, este viernes se registraron múltiples manifestaciones, algunas en apoyo, otra en rechazo y en demanda de apoyo a diversos sectores
como los de grupos de comerciantes, campesinos, trabajadores de salud y maestros. El mandatario federal dijo estar acostumbrado “a la bulla” después de haber estado muchos años en la oposición.
El titular del Ejecutivo realizó actividades difundidas a través de transmisiones digitales y con asistencia de invitados especiales, en las instalaciones de la 24ª. Zona Militar y posteriormente en el hospital Carlos
Calero del ISSSTE, pero afuera de ambas sedes se registraron diversas manifestaciones sociales.
Desde temprana hora, integrantes de la Unión Nacional de Trabajadores Agrícolas (UNTA) pidieron audiencia con el presidente. Los inconformes demandaron recursos para el campo, ante la falta de apoyos
-aseguraron- para fertilizantes y la reducción del presupuesto federal destinado al agro. Miembros del movimiento anti-AMLO también realizaron una caravana de protesta desde la Paloma de la Paz hasta las avenidas aledañas a “la Zona Militar. A bordo de vehículos, circularon por el lugar haciendo sonar el cláxon para expresar su rechazo a la política gubernamental del actual mandatario.
Es “bulla” con fines electorales: AMLO
En el interior de las instalaciones militares, López Obrador dijo que escucha a los ciudadanos que ejercen su derecho a manifestarse, pero señaló que son protestas con fines electorales porque vienen las elecciones: “La mayoría de ellos son panistas, seguramente”, anotó.
“Yo voy a seguir recorriendo el país, si se están manifestando en carros pues que lo hagan; yo siempre voy a seguir a ras de tierra y no me voy a movilizar en helicópteros ni aviones”, aseveró.
El mandatario también dijo que está acostumbrado a eso: “Es mi mero mole, vengo de la oposición, luché durante muchos años para cambiar al régimen de injusticias, de privilegios; es normal que haya protestas y más ahora que vienen las elecciones y son militantes, la mayoría del PAN, que han decidido utilizar esta estrategia para hacer campaña, pero es más ruido que nada, es bulla”.
Por su parte, comuneros de Tepoztlán también se manifestaron y expresaron su apoyo al presidente AMLO; le solicitaron una audiencia para plantear el tema de las 280 hectáreas de tierras que mediante un juicio que duró 19 años se rescataron de inversionistas que pretendían construir un club de golf en ese municipio.
Esteban Ramírez Castañeda, vocero de los comuneros, dijo que el actual presidente les apoyó y ahora quieren que esas tierras se destinen para su fin original.
Asimismo, maestros de nuevo ingreso se movilizaron durante la visita de López Obrador para solicitar apoyo del mandatario federal; demandan prórroga en la vigencia de los resultados de su examen de ingreso al servicio profesional docente, auditoría al Instituto de la Educación Básica del Estado de Morelos (IEBEM) y transparencia en la asignación de plazas definitivas.
Los profesores efectuaron un bloqueo a la circulación vehicular en los carriles con dirección norte a sur en la avenida Emiliano Zapata durante casi dos horas.
Discuten por AMLO
Cabe señalar que seguidores del presidente de México discutieron con manifestantes anti-AMLO afuera de la 24ª. Zona Militar, donde el mandatario se reunió con el gabinete de seguridad y ofreció su conferencia de prensa matutina.
Mientras un grupo reclamaba la salida del actual gobernante, el otro los acusaba de “traidores” y se autodenominaban “AMLOvers”. El incidente no pasó a la agresión física.
Ya en la sede del segundo punto, en el hospital del ISSSTE, le aguardaban otros grupos.
Integrantes del Movimiento Antorchista protestaron para reclamar apoyo alimentario y la entrega de fertilizantes a pequeños productores.
Miguel Ángel Ocampo Lara, líder antorchista, señaló que es necesario un plan de trabajo emergente para apoyar a la población vulnerable.
En la avenida Álvaro Obregón, frente al hospital “Carlos Calero Elorduy” también se manifestaron comerciantes establecidos del centro histórico de la capital de Morelos; al respecto, Eduardo Peimbert Ortiz, señaló
que se plantea la necesidad de salvar fuentes de trabajo mediante financiamiento rápido y seguro a los pequeños y medianos empresarios.
Aseveró que con la pandemia hay cuando menos diez mil negocios en crisis.
Finalmente, trabajadores del extinto Seguro Popular demandaron su incorporación al Instituto de Salud para el Bienestar (Insabi); señalaron que son más de 200 los trabajadores que fueron despedidos y no han sido recontratados, como se les había prometido.