La Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF) intervino en el caso Bantú, el gorila que murió por una sobre dosis de anestesia.
El organismo, a cargo de Perla Gómez Gallardo, inició una investigación de oficio por “la presunta violación al derecho humano a un medio ambiente sano en su modalidad de omisión en la protección y conservación de especies en peligro de extinción”, por parte de la Secretaría del Medio Ambiente de la Ciudad de México.
Mediante un comunicado, la CDHDF informó que documentará y en su oportunidad solicitará que se realicen las acciones que correspondan a efecto de garantizar que la Sedema cumpla con sus obligaciones de contribuir con los compromisos nacionales e internacionales para conservar el patrimonio genético, indispensable en la recuperación de las poblaciones en peligro de extinción que se encuentran resguardadas en los zoológicos de la Ciudad de México.
Por tal motivo emitió medidas precautorias después de que se tuvo conocimiento de la muerte del primate, que iba a ser trasladado a Guadalajara para aparearse con dos hembras de su especie.
La CDHDF solicitó que personal de la Sedema realice la necropsia respectiva al cuerpo del espécimen fallecido, se permita que intervenga en ella o que la realice alguna instancia independiente del Gobierno de la Ciudad de México.
Lo anterior a fin de generar certeza respecto de las causas que provocaron el deceso.
Asimismo, pidió que se practiquen los estudios de laboratorio (cito e histopatológicos) correspondientes, que permitan correlacionar el resultado con lo observado durante la necropsia.
También solicitó que se informe oportunamente a través de medios de comunicación y con un lenguaje accesible, a las personas que habitan y transitan en la Ciudad de México respecto al resultado de la necropsia y de los estudios respectivos, a efecto de que se tenga certeza de las causas del fallecimiento del espécimen.
El viernes pasado, la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) realizó una visita de inspección al Zoológico de Chapultepec para recabar información e integrarla a la investigación que se inició para conocer la causa de muerte del gorila Bantú, ocurrida el pasado miércoles.
La depedendencia federal indicó que todos los elementos recabados serán integrados y analizados en su conjunto, para determinar si la muerte fue causada por una negligencia médica o error humano en la aplicación del protocolo.
Enfatizó que recabará y analizará todos los elementos para determinar si el personal que llevó a cabo el manejo del gorila realizó actos no apropiados o no se tuvo la diligencia requerida para efectuarlo bajo condiciones que evitaran o disminuyeran la tensión, sufrimiento, traumatismo y dolor del ejemplar.
En aproximadamente un mes, abundó, se contará con los resultados de los laboratorios de patología y se determinará lo que corresponda.