A disposición del gobierno recursos por 61 mil mdd para contingencias
Los choques derivados de la pandemia de Covid-19 han representado "un alto costo para el pueblo mexicano", sostuvo este viernes el Fondo Monetario Internacional (FMI). La economía del país, sin embargo, ha mostrado resiliencia, "resultado de la gran solidez de las políticas y los marcos de políticas institucionales", como una meta creíble de inflación, el cumplimiento de la ley de responsabilidad fiscal y un sector financiero bien regulado, según el organismo.
La valoración fue hecha por el FMI a propósito de la revisión de una línea de crédito flexible (LCF) que México mantiene con esa institución, por un monto de 61 mil millones de dólares, que están a disposición del país para enfrentar una contingencia financiera causada por un choque externo. La LCF, renovada hace un año y que vence en 2021, es un tipo de financiamiento que no implica ningún compromiso de política económica.
Desde que fue contratada por México en 2009, la LCF ha sido renovada cada dos años, en montos decrecientes. Hasta ahora no ha sido utilizada y, en esta ocasión, las autoridades manifestaron al FMI su intención de no recurrir al financiamiento, pero sí de mantenerlo en el monto establecido hace un año –se anticipaba para esta revisión que se redujera en 13 mil millones de dólares– a fin de contar con ese seguro para enfrentar eventualidades.
"México se ha visto sacudido por una confluencia extraordinaria de choques derivados de la pandemia de Covid-19, con un alto costo para el pueblo mexicano", dijo Geoffrey Okamoto, primer subdirector gerente y presidente interino del directorio.
La economía mexicana, explicó, continúa expuesta a riesgos externos, incluidos el resurgimiento mundial de la pandemia que podría traducirse en una menor demanda externa, una postergación de la recuperación del turismo y una caída de los precios del petróleo.
"Las tensiones internacionales en torno a los suministros sanitarios, el repliegue prematuro de las políticas de respaldo de las economías avanzadas y las persistentes controversias comerciales podrían distorsionar más el sentimiento de los mercados. La LCF continuará desempeñando un papel importante de apoyo a la estrategia macroeconómica de las autoridades para ofrecer un seguro frente a los riesgos externos y apuntalar la confianza del mercado", dijo.
Una vez conocida la valoración del FMI, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público y el Banco de México aseguraron en un comunicado conjunto que evaluarán la puesta en marcha de una estrategia de salida gradual y ordenada de ese financiamiento, lo cual será decidido con base en el panorama de riesgos que tenga la nación.
Reiteraron que la LFC tiene un "carácter precautorio", por lo que sólo complementa las políticas económicas de las autoridades mexicanas para enfrentar condiciones económicas externas adversas y preservar la estabilidad económica y financiera. "La LCF es un instrumento que refuerza las reservas internacionales", dijo.
Con esto, "las autoridades refrendan su compromiso con políticas macroeconómicas sólidas y responsables, que abonen a la estabilidad y a una reactivación económica vigorosa y sostenida", agregaron.