De los casos registrados aquí, 18.3 por ciento corresponde a legisladores, el resto a trabajadores; virus cobra la vida de 40 personas en ambas Cámaras: 2 diputados y 1 senador.
Durante el periodo que funcionó la Comisión Permanente se lograron un total de seis sesiones.Foto: Especial
La pandemia no ha tratado bien al Congreso mexicano, pues desde el pasado 27 de febrero, día en que se registró el primer contagio en el país, entre la Cámara de Diputados y el Senado han ocurrido 718 transmisiones, de las cuales, 132 corresponde a legisladores (18.3 por ciento) y el resto, a trabajadores.
Esta cifra es 148 por ciento más alta si se le compara con el Congreso de Estados Unidos, donde la pandemia inició incluso un mes antes que en México, y donde se contabilizan 289 contagiados; 220 de ellos trabajadores y 69 legisladores.
Además, desde octubre, cuando se registró el pico de contagios en la Cámara de Diputados y el Senado, el número de infectados se incrementó en 85.6 por ciento.
De los 718 contagios que se registran en el Congreso, 457 se dieron durante el periodo del 27 febrero al 26 octubre; es decir que durante ocho meses se contabilizaron 57.1 infectados por mes; sin embargo, del 26 octubre al 27 enero se registraron 318 casos más, lo que equivale a 106 por mes.
Del total de personas contagiadas que se han dado en ambas cámaras, 40 han perdido la vida, entre las que se encuentran dos diputados y un senador.
.Gráfico: La Razón de México
De acuerdo a las cifras, desde iniciada la pandemia prácticamente se ha infectado un empleado del Congreso cada 12 horas; en tanto que la frecuencia de contagio de los legisladores es de uno cada tres días.
De los 69 legisladores del Congreso de Estados Unidos, 47 son republicanos y 22 demócratas.
Hasta ahora, ninguno ha perdido la vida; sin embargo, el pasado 29 de diciembre el congresista electo Luke Lewton murió víctima del virus (cabe aclarar que no fue contabilizado porque aún no ocupaba su escaño). Respecto a los empleados, sólo uno ha fallecido.
La diferencia en el número de legisladores de ambos países no es mucha: En México existen 628, 128 de ellos senadores y 500 diputados; mientras que en el país vecino del norte son 535, 100 de ellos senadores y 435 representantes.
En donde sí hay diferencias es en la manera en que ambos congresos atendieron la pandemia; mientras que en EU decidieron legislar a distancia desde el 28 de abril, en México lo hicieron hasta el 4 de noviembre.
De acuerdo con fuentes de La Razón, hasta el 15 de enero, la Cámara de Diputados en México contabilizó a 102 de sus 500 legisladores quienes dieron positivo al Covid-19, además de 432 trabajadores del recinto, acumulando un total de 25 muertes a causa de esa enfermedad.
En tanto, en el Senado se registraron, hasta el 15 de enero, 156 contagios de empleados y 30 de senadores, de los cuales hubo 15 decesos.
Los legisladores que perdieron la vida víctimas del coronavirus, son los diputados Miguel Acundo del PES, el 16 de diciembre de 2020; Delfino López del grupo parlamentario de Morena, el 21 de diciembre del año pasado; además del senador morenista, Joel Molina, el 24 de octubre.
En la Cámara baja el primer contagio por Covid-19 se reportó el 29 de marzo, con el caso de Jorge Alcibíades García Lara, de Movimiento Ciudadano, mientras que el último caso reportado fue el pasado 8 de enero, cuando la diputada Tania Cruz Santos, de Morena, anunció que dio positivo a la enfermedad.
En la Cámara de Senadores el primer registro fue Miguel Ángel Osorio Chong, del PRI, quien dio positivo a la enfermedad el 30 de abril de 2020, mientras que la última legisladora en anunciar que contrajo la enfermedad fue la morenista representante de Campeche, Susana Harp Iturribarría.
A estos datos hay que agregar que la Ciudad de México se encuentra en semáforo rojo por la pandemia, y a pesar del número de contagios en ambas cámaras, este 1 de febrero se realizará la instalación del Congreso federal.
En entrevista con este rotativo, la presidenta de la Mesa Directiva de la Cámara baja, Dulce María Sauri Riancho, reconoció que se trata de un acto “riesgoso”, pero que no se puede posponer ni realizar de manera 100 por ciento virtual, porque es un mandato constitucional.
“La instalación del congreso federal es un acto que está regido por la constitución, es riesgoso, pero es una obligación, entonces acá no hay que decidir si lo hacemos o no lo hacemos, lo vamos a hacer”, puntualizó.
La semana pasada los integrantes de la Junta de Coordinación Política (Jucopo) y de la Conferencia para la Dirección y Programación de los Trabajos Legislativos, aprobaron que la instalación del Congreso General se realice de forma telemática, y para cumplir con el mandato constitucional de que haya presencia física, solo estarán presentes los integrantes de las Mesas Directivas de ambas Cámaras.
“Se examinaron opciones y por esta causa superviniente de la pandemia sí es posible. Se revisó si esto era violatorio de la constitución y la respuesta es no, es una ceremonia de siete minutos”, explicó a La Razón el coordinador del Partido Acción Nacional (PAN), Juan Carlos Romero Hicks.
Así, en el Salón de plenos sólo se ubicarán los presidentes de ambas cámaras, además de una secretaría y una vicepresidencia tanto por parte del senado como de diputados, mientras que afuera, estará operando el equipo técnico y de logística encargado de la transmisión, que no rebasa las 30 personas.