El regidor perredista Rafael Domínguez Galindo señaló
que si bien los cambios de titulares en diferentes dependencias
municipales deben ser aprobados por el Cabildo,
es necesario que el gobierno municipal tenga una oxigenación
y dio su voto de confianza a quienes son propuestos
como nuevos funcionarios.
El munícipe dijo que hasta ayer sólo se habían enterado de los
movimientos por lo que ha sido publicado en los medios,
ya que el secretario del Ayuntamiento, Samuel Sotelo Salgado,
no les ha informado de forma oficial nada.
Sin embargo, dijo que “el municipio debe de tener un respiro, con nuevos
personajes para poder seguir avanzando”.
Señaló que el conflicto de intereses registrado entre el alcalde
Cuauhtémoc Blanco Bravo, José Manuel Sanz Rivera y los
hermanos Julio y Roberto Yáñez, ha generado un desgaste
en el municipio.
Cuestionó incluso al regidor Eduardo Bordonave Zamora,
pues a pesar de que sabía de los presuntos malos manejos, no
realizó ninguna denuncia antes y se esperó hasta que afloró el
conflicto. “Tuvo que haber denunciado en su momento, lo
cual no hizo sino hasta ahora que están en pleito”.
Dijo que Eduardo Bordonave también se ha manejado de forma
discrecional en cuanto a información y realizó señalamientos
en contra de los regidores que estaban en su contra, acusándolos
incluso de estar vinculados con el narcotráfico; ante
esos señalamientos sin sustento, dijo: “A Bordonave hay que
creerle el 30% de lo que dice”.