Durante febrero, la inflación anual continuó su tendencia al alza por segundo mes consecutivo, impulsada por los incrementos de los precios en gasolinas y gas LP, de acuerdo con estadísticas del el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró un alza de 0.63% respecto al mes anterior, con lo que la inflación anual se ubicó en 3.76%, el mayor nivel reportado desde octubre de 2020.
Esta aceleración responde al rebote en los precios de energía derivada de la recuperación en la cotización internacional del petróleo, así como de algunos bienes pecuarios desencadenados por los mayores precios de insumos; en menor medida, también responde a que algunas mercancías como la tortilla también se ajustaron al alza”, explicó Alejandro Saldaña, economista en jefe de Ve por Más (BX+).
De acuerdo con las estadísticas del organismo autónomo, los productos con variaciones de precios al alza que tuvieron mayor incidencia en la inflación general fueron la gasolina de bajo octanaje, con un encarecimiento mensual de 4.59%, seguido del gas doméstico LP, con aumento de 4.28 por ciento. La gasolina de alto octanaje, aunque tuvo una menor incidencia, reportó un incremento mensual de 5.08 por ciento.
RECORTE DE TASA
Anticipó que el regreso en la inflación, en el verano, daría espacio para que Banxico relaje su postura monetaria, más considerando la nueva composición de la Junta de Gobierno.
Ante riesgos mixtos para la inflación, alta incertidumbre económica y volatilidad financiera, este espacio es escaso, pero no descartamos una baja de 25 puntos base en la tasa objetivo en lo que resta del año”, agregó Saldaña.
SUPERARÁ EL UMBRAL DE 4.00%: ANALISTA
Pese a que en febrero el encarecimiento de productos y servicios se aceleró, la inflación anual se mantiene debajo del 4.00%, meta del Banco de México (Banxico), desde noviembre pasado, racha que podría concluir en marzo.
La variable se acelerará en la primavera por encima del 4.00%, en gran medida por el rebote en los precios de energéticos y otras materias primas, y las distorsiones generadas por el confinamiento, el cual refleja presión en mercancías y debilidad en servicios”, dijo Saldaña.
El analista anticipó en entrevista que después, en un contexto de bajo crecimiento económico y amplias condiciones de holgura, la inflación regresará al rango de tolerancia.
Otro factor que puede operar en favor de una menor inflación es la expectativa de una menor depreciación del peso en relación a 2020”.
Sin embargo, el analista de Bx+ explicó que los riesgos al alza para los precios han tomado fuerza, destacando el incremento al salario mínimo; la posibilidad de que el repunte en precios de materias primas sea más sostenido a lo esperado; presión en el tipo de cambio, por recientes factores externos (temores inflacionarios) y locales (iniciativas legislativas, riesgos para finanzas públicas y Pemex).