El exrector no se presentó a audiencia donde sería imputado por peculado
Es acusado de haber comprometido 450 millones de pesos de la universidad
Una juez declaró como sustraído de la acción de la justicia al ex rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, Alejandro Vera Jiménez, quien la mañana de este martes no se presentó a una audiencia en la que sería imputado por el delito de peculado.
Una juez declaró como sustraído de la acción de la justicia al ex rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos, Alejandro Vera Jiménez, quien la mañana de este martes no se presentó a una audiencia en la que sería imputado por el delito de peculado.
De acuerdo con la información de la Fiscalía Especializada en Combate a la Corrupción de Morelos, el también excandidato a la gubernatura por el partido Nueva Alianza debió haber asistido a dicha audiencia que se realizaría en la Ciudad Judicial del poblado de Atlacholoaya en el municipio de Xochitepec, sin embargo, el abogado del ex rector no pudo justificar ante la jueza la inasistencia del señalado.
Ante tal situación, la juez determinó declararlo como sustraído de la acción de la justicia e instruyó a la Fiscalía Anticorrupción corroborar su domicilio para ordenar su comparecencia por la fuerza pública.
Y es que, cabe recordar, que el exrector de la máxima casa de estudios en la entidad presuntamente comprometió 450 millones de pesos de la universidad, los cuales eran recursos del subsidio otorgado por el gobierno de Morelos a la UAEM, ya que los utilizaron como garantía del crédito con Banco Interacciones a pesar de que estaban destinados a la política salarial, plazas de nueva creación, carrera docente, gastos de operación, desarrollo de programas y proyectos de docencia, investigación y difusión de la cultura, así como los apoyos administrativos necesarios para la prestación del servicio educativo.
También es importante precisar que Alejandro Vera Jiménez fue acusado de irregularidades financieras en la denominada "Estafa Maestra", ya que la máxima casa de estudios subcontrató a una empresa para la prestación de servicios en la llamada Cruzada Contra el Hambre, lo cual era indebido, y los servicios nunca se recibieron completos.