Urge a Querétaro, Colima y Morelos a que hagan reformas para dar viabilidad al tema
Si bien el tema de las pensiones estatales es una bomba de tiempo, en Querétaro, Colima y Morelos el problema está a punto de estallar, alertó la firma de consultoría ARegional.
“Si se les caen las participaciones a estos estados, no tendrán cómo pagar las pensiones a sus trabajadores, porque las están sosteniendo con su gasto corriente; no tienen un esquema de aportaciones”, advirtió la directora de la institución, Flavia Rodríguez.
En conferencia de prensa en dónde presentó el reporte de la situación y características de las pensiones estatales, dijo que urge que dichas entidades hagan reformas para darle viabilidad a ese tema y asegurar la jubilación de sus trabajadores.
Se necesita que realicen cambios legales y que formalicen institucionalmente sus esquemas de seguridad social, señaló.
Dijo que para evitar la quiebra, pueden crear sus propias instituciones o afiliar a los servidores públicos al ISSSTE o al IMSS para frenar el riesgo de contingencia que representa el déficit actuarial que se presenta en el pago de obligaciones futuras, consideró.
Advirtió que nueve entidades federativas no tienen establecida una edad mínima para pensionados, lo que pone en riesgo la viabilidad financiera de sus finanzas locales.
En sus leyes se establece que se pueden retirar a cualquier edad, cuando cumplan al menos 30 o más años de servicio, lo que se puede convertir en una bomba de tiempo en circunstancias en que la esperanza de vida está creciendo.
“Si un trabajador empezó a trabajar a los 18 años de edad, a los 48 años puede jubilarse, esperando vivir hasta los 75 con una pensión de 100% de su último salario”, ponderó.
Edén de las pensiones. En la lista de situaciones de riesgo aparecen Querétaro, Colima, Morelos, San Luis Potosí, Coahuila, Chiapas, Michoacán, y Yucatán. Sin embargo, Rodríguez mencionó como un caso especial el de Querétaro, que se perfila como el edén de las pensiones, ya que el esquema de retiro no tiene un tope salarial y hay jubilados que tienen una pensión mayor al sueldo del gobernador.
En esa entidad, apuntó, hay una situación realmente preocupante, ya que mientras que en 2013 se destinaron 314.02 millones de pesos, dos años después ese monto aumentó a 520.43 millones de pesos y para este año se estimó un presupuesto de 579.10 millones de pesos.
Además, dijo que para evadir el problema algunos gobiernos están contratando empleados públicos por honorarios, para no dar derechos adquiridos, y otros están otorgando bonos para retrasar el momento de la jubilación
Rodríguez aseguró que son muy pocos los estados que tienen un esquema de pensiones viable desde el punto de vista financiero, por lo que sigue preocupando el tema.
Al hacer una revisión de las Leyes de Seguridad Social de la entidades, ARegional mencionó que Aguascalientes, Chihuahua, Nuevo León, Jalisco y Sinaloa reformaron sus esquemas de retiro para hacerlos sostenibles en el largo plazo a través de cambios similares a nivel nacional, pero al mismo tiempo están financiando el proceso de transición del sistema viejo al nuevo, lo que les provoca problemas como en el caso de Nuevo León.