Una de las facciones en que se ha dividido la Barra de Abogados del Estado de Morelos se sumó a las voces que exigen frenar los procesos de designación de magistrados de los tribunales Superior de Justicia (TSJ) y Justicia Administrativa (TJA), porque sería indebido e inmoral que la legislatura que concluye tome como rehén a la justicia por intereses políticos.
Miguel Ángel Rosete Flores, presidente una de las dos organizaciones que se denominan Barra de Abogados, señaló que parece que las componendas políticas prevalecen en el proceso de designación, que pretende consumarse en la recta final de la LIV legislatura. Lamentó que los legisladores salientes, con total y opacidad y con la premura del fin de su periodo, pretendan realizar al vapor y bajo intereses ajenos a la buena administración de justicia los nombramientos de magistrados, como lo hizo la anterior legislatura.
Señaló que la postura de la Barra de Abogados que encabeza es clara: que el proceso de designación se posponga y que el asunto sea heredado a la siguiente legislatura y que se trasparente el proceso, los perfiles y trayectorias de las y los candidatos a las magistraturas, para que la sociedad tenga certeza de que las mujeres u hombres elegidos son los idóneos para ejercer un cargo tan relevante.
Además de las magistraturas del TSJ y TJA, también están pendientes los nombramientos de tres nuevos comisionados y comisionadas del Instituto Morelense de Información Pública y Estadística (IMIPE) y la titular de la Comisión Ejecutiva de Atención y Reparación a Víctimas del Estado de Morelos.