Denuncian capturas y desapariciones tras manifestaciones; cuentan al menos 100; Presidente Díaz-Canel dice que no permitirá expresiones que fracturen; culpa a asfixia económica; Joe Biden pide atender el reclamo y necesidades del pueblo; destaca protesta pacífica; Rusia, Argentina, Bolivia y Nicaragua critican injerencismo; UE y Brasil llaman a respetar derechos; AMLO pide suspender el bloqueo; ofrece medicinas, vacunas y alimentos
Por segundo día consecutivo, aunque con menor presencia, se registraron protestas contra el régimen de Miguel Díaz-Canel en evidencia del descontento por la crisis económica en Cuba; en respuesta, el presidente tachó de criminales y pagados por Estados Unidos a quienes se unieron a los desmanes y saqueos del #11J, y culpó a esa nación de fracturar al país.
Los internacionalistas Andrés Serbin y Stephanie Henaro señalaron a La Razón que la situación evidencia un hartazgo agravado en los últimos años, mismo que detonó una gran insatisfacción social, pues a la población no le alcanza para comprar comida ante la contracción de 2020 generada por la pandemia, ni cuenta con acceso a dólares para adquirir productos básicos y el país se sume en una severa caída en el turismo.
Al respecto, Serbin, presidente de la Coordinadora Regional de Investigaciones Económicas y Sociales (CRIES), aseveró que la duda ahora es la reacción a futuro, pues hasta el momento el sucesor de Raúl Castro no ha mostrado tener la capacidad para controlar una situación de esta magnitud o por lo menos no como lo hicieron Fidel Castro y su hermano, en su momento; y advirtió “no sé cuánto pueda sostener una situación insostenible desde el punto de vista económico”.
Refirió que la clave está en el cambio estructural al modelo cubano, pero admitió que hay mucha resistencia e insistió que éste no se dará de la noche a la mañana, ya que se requiere una estrategia coherente en materia de seguridad alimentaria y hasta respaldo mundial, pues es necesario atraer inversión para revertir la crisis que demanda el pueblo, como piden atender el presidente Joe Biden y la Unión Europea.
También dijo que los bajos ingresos y falta de divisas se conjugaron el pasado 11 de julio lo que detonó una gran movilización sin procedentes por lo espontáneo de éstas.
En tanto, Henaro sostuvo que en la isla hay mucha furia tanto en la población como del Gobierno, pues en la actualidad “es imposible ocultar (el descontento) en tiempos de redes sociales”, pese a cortes intermitentes en el servicio de Internet.
Apuntó que la revolución que pregonan sí ha tenido éxitos como en ciencia, medicina, educación y cultura, pero en todos estos años también “hay tres fracasos que se repiten todos los días”, en referencia a los problemas de alimentación.
Henaro reiteró que en el último año se recrudeció la situación, pues la gente no ha visto un verdadero progreso en 60 años y sigue esperando que el Gobierno cumpla promesas que son inciertas.
La especialista advirtió que la situación en Cuba puede generar una división regional muy fuerte, especialmente ante quienes respaldan la postura comunista, por lo que en caso de no detener el avance de una represión se corre el riesgo de que lo intenten imitar, pero si se frena “otros se lo van a pensar dos veces”, sostuvo.
En torno, al embargo y asfixia económica denunciada por Díaz-Canel, Serbin refirió que esa situación sigue teniendo validez en el impacto económico, pues EU no ha derogado estas acciones y aunque Cuba pueda recibir ayuda humanitaria, como ofreció México, la asistencia dependerá de qué intereses haya para aceptar.
Y agregó que, aunque el diálogo en el país es una opción de salida, no será fácil pues no hay un liderazgo tan grande para llevar adelante esta interlocución.
Mientras que Henaro puntualizó que difícilmente habrá una negociación con EU, pues es una manera de ejercer presión contra el régimen caribeño. Y coincidieron en que la represión podría continuar en los próximos días con el llamado de Díaz-Canel a combatir a los antirrevolucionarios.
En tanto, EU rechazó las implicaciones en las movilizaciones, incluso, el secretario de Estado, Antony Blinken, calificó de “grave error” señalar a su nación cuando la realidad es que el pueblo está cansado de una mala gestión, como en la pandemia.
“QUE EL MUNDO SE ENTERE”
Ante los constantes cortes al Internet, ciudadanos sólo exigen mayor difusión sobre la crisis y la represión que el mandatario respalda al desplegar a la Policía y al Ejército y lanzar “la orden de combate está dada”.
“Queremos el principio del fin de una dictadura”, señaló Keyla, originaria de la isla, quien advierte que sólo un milagro sacará a esta nación de la crisis en la que no hay ni medicina ni comida y la que se consigue es tras siete de horas de espera en filas inacabables.
En medio de estos nuevos reclamos, disidentes buscan a sus familiares que llevan más de 24 horas desaparecidos o arrestados, pero que no están en los centros de detención, según el Gobierno.
Al respecto, Stephanie Henaro alertó que la situación podría agravarse, pues ante la falta de redes sociales aún no se conoce la magnitud de la represión y no hay cifras de heridos o aprehendidos, mientras que el Movimiento San Isidro contabiliza más de un centenar de éstos, pues no se sabe de su paradero.
Además, se reportó que durante varias horas se redujo el servicio a Internet y acusan que el régimen lo restringió para evitar que el mundo sepa las condiciones en que se encuentra la región. Algunos relataron que tienen que andar cazando la señal para reportarse con familiares o dar cuenta de múltiples actos represivos.