Empleados de las empresas DKDA Servicios de Recolección de Basura y KS Ambiental cerraron la avenida Subida a Chalma, en Cuernavaca, Morelos, y agredieron a manifestantes que se oponen a que se siga rellenando el basurero de Loma de Mejía.
Cuernavaca, Mor., Unos 100 trabajadores de las empresas DKDA Servicios de Recolección de Basura y KS Ambiental retiraron a golpes a pobladores de los municipios de Cuernavaca y Temixco, quienes se manifestaron en contra de que camiones recolectores de basura pasen por sus vecindarios para depositar desperdicios en el relleno sanitario de la comunidad Loma de Mejía, que, según los inconformes, viola la norma oficial mexicana 083, referente al diseño, construcción, operación, vigilancia, clausura y obras complementarias de un sitio de disposición final de residuos sólidos.
Cinco habitantes resultaron heridos en el enfrentamiento, ocurrido ayer alrededor de las 14:00 horas. La protesta de los vecinos, la tercera en una semana, comenzó la mañana de este lunes y con ella se impidió que más de 20 vehículos que recolectan desechos circularan por la avenida Subida a Chalma hacia el tiradero Loma de Mejía, el cual, de acuerdo con habitantes, contamina el medio ambiente y el agua de Cuernavaca.
Después de la golpiza, los cinco afectados denunciaron a los empleados de DKDA Servicios de Recolección de Basura y KS Ambiental –contratados por el ayuntamiento para el servicio de limpia en Cuernavaca– ante la Fiscalía General del Estado por lesiones y amenazas de muerte. “Un señor, un líder, los azuzó, les dijo: ‘Denles, a la chingada, los vamos a matar’”, señaló uno de los agredidos.
Otro de los denunciantes expuso que los choferes de camiones de limpia pretendieron embestir con sus vehículos a los manifestantes, y se interpuso entre ambos bandos con una camioneta. Narró que entonces comenzó el zafarrancho.
Entre golpes y amenazas a los inconformes, los trabajadores quitaron la camioneta y abrieron paso a los camiones pesados.
Los manifestantes exigieron al gobierno federal que intervenga y advirtieron que continuarán con sus protestas y recordaron que el tiradero en Loma de Mejía fue clausurado en 2010 debido a incumplimiento de normas ambientales, pero el ayuntamiento de Cuernavaca lo reabrió en enero pasado "para ganar dinero".