Padres de familia de la Escuela Primaria “Cuauhtémoc” de Jojutla dieron a conocer que les informaron que las clases serán presenciales a partir del próximo 30 de agosto, aunque de manera voluntaria, pero quien no desee enviar a sus hijos a la escuela, recibirá una guía con la que auxiliará a su hijo y deberá entregarla cada 15 días.
Madres de familia de segundo grado (quienes pidieron el anonimato) comentaron que en reunión virtual, este lunes, se les anunció de la disposición. El grupo se dividirá en dos partes; una tendrá clases lunes y martes, y la otra, miércoles y jueves.
Se aclaró que quienes no asistan no tendrán clases virtuales; sólo recibirán una guía cada 15 días para que los padres orienten a sus hijos para que puedan obtener calificación.
Esto no gustó a los padres, que solicitaron que por lo menos el viernes se dieran clases virtuales a quienes no asistan de manera presencial, lo cual la maestra les dijo que se evaluará.
Sólo el 20 por ciento de los padres aceptaron enviar a sus hijos a clases, dijeron.
Resaltaron que definitivamente no habrá carta compromiso, pero sí se conformaron dos comités con los padres de familia: uno de limpieza, que se encargará de sanear este viernes el salón de clases y otro de salud, que se encargará de vigilar los filtros sanitarios a la entrada de la escuela.
Una madre de familia señaló que no se entregó material desinfectante suficiente, por lo que ya les anticiparon que los padres deberán aportar recursos para realizar la limpieza del salón.
Subrayó que planteó que no es lógico que en el pico de contagios se reanuden clases, que mejor deberían esperar un poco más, a lo que respondieron que las órdenes son ya comenzar.
“Están en juego los derechos a la vida, a la salud y a la educación, y debe prevalecer el de la vida. Deberíamos esperar un poco más.
La educación podríamos recibirla como el año anterior. Los niños pudieron tener contacto con sus compañeros y la maestra a través de sus dispositivos. El gobierno debe dar las condiciones necesarias para realizar las clases presenciales, pero ni siquiera han dado una aportación económica o en especie suficiente para la sanitización del inmueble.
Quiere decir que no está preparado ni el estado ni los padres, además de que los menores todavía no están inmunizados con la vacuna”, concluyó.