Llama a organizaciones de la sociedad civil a evaluar áreas en las que puede contribuir a reducir los índices de pobreza
Ayer se reunieron Manuel Arango, presidente honorario del Centro Mexicano para la Filantropía, y José Antonio Meade, secretario de Desarrollo Social, en las instalaciones de la Indesol. Foto: Especial
CIUDAD DE MÉXICO.
En el cumplimiento de metas para combatir la pobreza, el secretario de Desarrollo Social, José Antonio Meade, propuso elevar la corresponsabilidad y compromiso del gobierno federal y las organizaciones de la sociedad civil.
El funcionario planteó destinar esfuerzos en la detección y reducción de las carencias sociales, tomando en cuenta la metodología de medición de pobreza del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) y así contribuir a mejorar la calidad de vida de millones de mexicanos.
Meade se reunió con integrantes del Centro Mexicano para la Filantropía y otras asociaciones civiles.
Ahí, planteó escenarios en los que la sociedad puede participar en la detección y reducción de carencias en alimentación, educación, salud, seguridad social e ingreso.
En alimentación, propuso focalizar programas con énfasis en niños entre 0 y 5 años.
El Coneval y el Inegi sostuvieron recientemente un diferendo debido a que el instituto cambió la metodología para medir el índice de pobreza, y el Coneval consideró que 2015 no se podría comparar con años anteriores. Ambas entidades acordaron no publicar ese indicador.
La Sedesol respalda método del Coneval
El secretario de Desarrollo Social pidió a organizaciones de la sociedad civil tomar en cuenta la metodología de medición de la pobreza del Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) para la detección y reducción de las carencias en educación, salud, seguridad social, calidad y espacios en la vivienda, servicios básicos, alimentación e ingreso, que son el eje de la política gubernamental contra la pobreza.
En una reunión de trabajo con integrantes del Centro Mexicano para la Filantropía y otras organizaciones de la sociedad, el titular de la Sedesol, José Antonio Meade Kuribreña, también propuso incrementar la corresponsabilidad entre gobierno y ONG, con el fin de combatir la pobreza y mejorar las condiciones de vida de las familias que viven en situación de vulnerabilidad.
“Aquí quisiéramos, desde la Sedesol con la sociedad civil, hacer una alianza, en donde estos temas sean en los que trabajemos”, dijo.
El pasado 26 de julio, el Coneval y el Instituto de Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) publicaron un comunicado conjunto para anunciar que el primero no publicaría la medición de pobreza 2015 a nivel nacional y por entidad federativa ni su evolución, debido a las “condiciones actuales de no comparabilidad” del Módulo de Condiciones Socioeconómicas 2015 (MCS), con años anteriores.
El MCS fue encargado por la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) a la Sedesol para darle sustento al reparto de casi 70 mil millones de pesos del Fondo de Aportaciones para Infraestructura Social. Sedesol encargó el estudio al Coneval, y pagó al Inegi 154 millones de pesos para su realización.
Cooperación
Desde las instalaciones del Instituto Nacional de Desarrollo Social (Indesol), y acompañado de Vanessa Rubio, subsecretaria de Planeación, Evaluación y Desarrollo Regional de la Sedesol, apuntó que la participación social es esencial, ya que si se detectan carencias en la población objetivo y se vinculan con el gobierno federal se tendría un impacto integral.
Por su parte, Manuel Arango, presidente honorario del Centro Mexicano para la Filantropía, coincidió con la idea del titular de la Secretaría de Desarrollo Social en la unión de organizaciones de la sociedad y gobierno.
“Los grandes problemas, requieren de grandes alianzas para solucionarlos, y esas grandes alianzas deben ser entre gobierno, sociedad civil e iniciativa privada, trabajando conjuntamente, no descalificándose.
“Hay mucha gente en este momento que quiere construir, que quiere trabajar conjuntamente para encontrar la forma de incentivar la labor de cada uno de nuestros sectores”, dijo.
Participación
A su vez, Meade sugirió a las organizaciones de la sociedad promover programas de fomento a la productividad que sean traducibles en empresas que generen empleos bien remunerados.
En ese sentido sostuvo que, a través de esquemas de deducción, estímulo fiscal y apoyos, el gobierno establece bases para continuar a lado de la sociedad civil como socios para tutelar un bien común.
Manifestó que en el tema educativo es necesario crear espacios para programas de certificación primaria y secundaria en los municipios con mayor rezago. En el tema de salud y seguridad social planteó el fortalecimiento de herramientas para la identificación de atrasos, así como crear sinergias con el gobierno para su atención.
Expuso que deben vincularse esfuerzos para fortalecer proyectos de construcción de viviendas dignas así como los sistemas de donación para proyectos de servicios básicos como la instalación de estufas y distribución de agua.
En materia alimentaria pidió focalizar programas de alta concentración de carencias, con especial atención en niños entre cero y cinco años de edad.
Durante la reunión, Federico Reyes Heroles, presidente de la Fundación Este País, mencionó que la filantropía en coordinación con el gobierno debe considerar el apoyo a los adultos mayores.
Piden destituir a director del Inegi
Por considerar que dañó la confianza y la autonomía del Inegi al modificar la metodología para medir la pobreza, el diputado Carlos Lomelí Bolaños pidió la destitución del director Julio Alfonso Santaella.
Consideró que, ante las consecuencias de ese cambio, resulta insuficiente la renuncia de Miguel Juan Cervera, director general de Estadísticas Sociodemográficas del Inegi, y quien fue señalado como el responsable de aprobar los ajustes.
“No es suficiente, pues la mayor responsabilidad recae sobre Santaella Castell.”
Lomelí expuso que la puesta en marcha de los cambios en el MCS 2015 “tuvo como objetivo maquillar las cifras sobre la pobreza y beneficiar al gobierno federal, quien pretende mostrar a la sociedad una falsa realidad donde la pobreza ha disminuido”.
Consideró que las modificaciones dañaron la credibilidad del Instituto e impidieron llevar a cabo una comparación de la pobreza con años anteriores, además de que se imposibilitó conocer, por primera vez en la historia del país, la evolución de la marginación a nivel municipal.
Dijo que esta situación provocó una confrontación entre el Inegi y el Coneval, cuyos comisionados alertaron que las modificaciones a las variables para calcular el ingreso de las familias representaban una ruptura en la continuidad de la medición, lo cual impediría comparar la evolución de la pobreza con años anteriores.