A pesar de que sus casas se ubican a 20 metros de las grietas y 50 metros del voladero que provocó el desgajamiento del cerro Piedras Preciosas, en el municipio de Jiutepec, Morelos, dos familias se niegan a abandonarlas, por lo que están en riesgo de que en cualquier momento la falla afecte sus viviendas.
La familia Villalobos López, integrada por seis adultos y dos menores, y la Guzmán Castorena formada por cinco adultos habitan inmuebles de dos pisos en la parte más alta de la colonia Vista Hermosa.
El 28 de septiembre, a las 4 de la mañana el cerro se desgajó y según los habitantes afectó 12 casas y ocho lotes; además evacuaron 40 núcleos familiares de la calle Piedras Preciosa y la José García, que era continuación de la Prolongación Diamante que desapareció tras el derrumbe.
En esa ocasión y sobre todo porque las grietas que aparecieron el 16 de septiembre en la parte media y baja del cerro, llegaron a la parte alta, elementos de protección civil municipal y estatal recomendaron a los pobladores salir, por la inestabilidad de la elevación.
Sin embargo, los Villalobos López y los Guzmán Castorena, no tenían a dónde ir ni tener dinero para rentar y pagar la mudanza, por lo que decidieron quedarse en sus casas. Las personas de la tercera edad, son las que se niegan a abandonar sus hogares y perder su patrimonio, pues aseguran que compraron y edificaron hace 40 años. "Mis padres lloran mucho, no quieren irse ni dejar su casa", lamentó Isamar Villalobos.
Exigió a las autoridades municipales y estatales dar a conocer los resultados del dictamen para saber del peligro corren; en caso de tener que evacuar, demandaron apoyo para trasladarse y vivir en otro lado, pues "casi no duermen" por el temor que sigan los derrumbes y se "trague sus viviendas".