Incognitapro

LA RAZÓN: Prenden alertas de riesgo humanitario ante reinicio del Quédate en México

El programa obliga a solicitantes de asilo en EU a permanecer aquí hasta 6 meses; se atendieron preocupaciones del país, dice SRE; en refugios aseguran que la medida los toma sin cupo ni recursos; en la era Trump llegó a haber 70 mil varados; ACNUR rechaza plan y avizora impacto en seguridad y DH; excomisionado del INM afirma que se beneficia a tratantes

El programa Quédate en México será reactivado el próximo lunes 6 de diciembre e implica retorno de migrantes por siete puntos de cruce en la frontera, que deberán esperar hasta seis meses mientras son procesados sus casos.

El Departamento de Seguridad Nacional (DHS, por sus siglas en inglés), informó que dialoga con el Gobierno de México para crear “refugios seguros que se rijan bajo los Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, por sus siglas en inglés).

Durante los dos años de su implementación, unas 70 mil personas solicitaron asilo y fueron adheridas a estos protocolos; luego, con la llegada de la administración del presidente Joe Biden, el MPP fue cancelado, pero el juez de distrito en Texas, Matthew Kacsmaryk, ordenó su reapertura.

Según el mandato judicial, en las fronteras de California con Baja California y de Texas con Tamaulipas serán reactivados los trámites migratorios y tendrán 22 jueces dedicados exclusivamente, para atender esos temas.

La demanda fue presentada por el fiscal general de Texas, Ken Paxton, y el fiscal general de Missouri, Eric Schmitt, ante la Corte de Distrito Norte de Texas, división de Amarillo, bajo el argumento de que el MPP pondrá freno a la “crisis criminal y humanitaria en la frontera” entre ambos países.
Migrantes, en su mayoría haitianos y africanos, ayer adaptaron el Estadio Olímpico de Tapachula, Chiapas, como albergue.Foto: Cuartoscuro

Entre los argumentos de los fiscales está que al permanecer en México, durante los procedimientos migratorios, los extranjeros sin documentos, se reduce en gran medida la carga sobre las agencias estatales y federales encargadas de defender la frontera, al inhibir el flujo de delitos.

Todos los migrantes sujetos al programa serán vacunados contra el Covid-19. Los mayores de edad serán inoculados con la fórmula unidosis de Johnson and Johnson y a los menores se les aplicará el primer biológico de Pfizer en México y la segunda al ingresar a EU, durante sus primeras audiencias.

“Estados Unidos va a ofrecer vacunación a los migrantes y buscamos recursos para las organizaciones internacionales que apoyan a migrantes. Habrá colaboración para que podamos tener pruebas Covid-19 a migrantes, son migrantes que han atravesado nuestro país y también tenemos una responsabilidad”, dijo Roberto Velasco, subsecretario de Relaciones Exteriores, en entrevista para el programa radiofónico Atando cabos con Denise Maerker.

La cancillería confirmó que el Gobierno de México llegó a un acuerdo con el de Estados Unidos para reiniciar el programa por razones humanitarias.

“El Gobierno de México ha decidido que, por razones humanitarias y de manera temporal, no retornará a sus países de origen a ciertos migrantes que tengan una cita para aparecer ante un juez migratorio en Estados Unidos, para solicitar asilo en ese país”, explicó en un comunicado publicado por la cancillería.

La medida de la sección 235(b)(2)(C) de la Ley de Inmigración y Nacionalidad de Estados Unidos, que fue implementada durante el gobierno de Donald Trump, implica que aquellas personas que soliciten asilo en Estados Unidos podrán esperar la resolución de su proceso en territorio mexicano.

De acuerdo con el documento, México aceptó la implementación del programa, debido a que el gobierno de Joe Biden se comprometió a atender todas las preocupaciones de índole humanitaria.

La dependencia detalló que dentro de las preocupaciones expuestas por México y aceptadas por Estados Unidos se encuentran, mayores recursos para albergues y organizaciones internacionales, la protección para grupos vulnerables, la consideración de las condiciones locales de seguridad y de capacidad de albergue y de atención del Instituto Nacional de Migración, así como la aplicación de medidas contra la Covid-19. También incluyen las revisiones médicas y la disponibilidad de vacunas para las personas migrantes, sujetas tanto a la sección 235(b)(2)(C) de la INA como al Título 42 del Código de EU.

“El Gobierno de México reitera su compromiso con los derechos humanos de las y los migrantes, así como para mantener una migración ordenada, segura y regular. México continuará promoviendo la cooperación para el desarrollo”, destacó la dependencia.

El dato: CNDH informó el 23 de noviembre que durante los últimos 10 años, más de 70 mil migrantes han sido víctimas de tráfico y secuestro en México.

Los albergues, saturados y sin presupuesto: activistas

Con albergues saturados y sin presupuesto, México empezará a recibir el lunes a migrantes que esperan sus audiencias para tramitar solicitudes de asilo en Estados Unidos, como parte del programa Quédate en México, advirtieron los refugios más grandes en la franja fronteriza.

“Lamentablemente nadie nos avisó, ningún orden de gobierno. Estamos saturados con la llegada de haitianos (...), centroamericanos y con cientos de mexicanos desplazados por la violencia”, dijo a Reuters, José García, director del albergue Juventud 2000 en Tijuana, una de las ciudades fronterizas donde se espera llegarán los retornados.

García, y una docena de responsables de otros albergues en Baja California y otras ciudades fronterizas, entrevistados por Reuters, dijeron que sus instalaciones estaban ocupadas hasta en 90 por ciento, por lo que difícilmente podrían recibir a más personas.

En entrevista con La Razón, Gustavo Banda Aceves, fundador del Templo para embajadores de Jesús, ubicado en Tijuana, aseguró que antes de que se hiciera el anuncio, ya se estaban preparando para poder albergar a una cantidad mayor de migrantes centroamericanos en 2022.

“En este momento ya llegó la caravana hace dos días aquí a la ciudad y se incrementó bastante, por día llegan 80 personas, pero con este nuevo anuncio del gobierno estamos esperando que la cantidad incremente”, aseguró Aceves.

El fundador del refugio, que pertenece a la Fundación Centro para Migrantes, dijo que con las donaciones que reciben de organizaciones estadounidenses e iglesias de dicho país, “ya se está construyendo un edificio para dar albergue a más de mil migrantes, además de una escuela, un sanatorio y un centro de salud bucal, proyectos que ya están en construcción y esperan terminar en el primer trimestre del siguiente año”.

“Antes teníamos 300 niños en la escuela, pero en estos días ha incrementado el flujo y ya tenemos 100 más, entonces los salones de clases ya no nos alcanzan para todos”, dijo.

La Acnur rechaza apoyar programa

La Agencia de la ONU para los Refugiados (Acnur) criticó el restablecimiento del programa “Quédate en México” y enfatizó que no apoyará su reactivación, en virtud de que las modificaciones anunciadas a esta política no son suficientes para dar respuesta a sus preocupaciones fundamentales.

“Desde el inicio, Acnur ha expresado su grave preocupación por los Protocolos de Protección a Migrantes (MPP, por sus siglas en inglés) y su impacto en la seguridad de las personas solicitantes de asilo y su derecho al debido proceso”, estableció el organismo internacional.

Aclaró que nunca participó en la implementación de los MPP y no apoyará el restablecimiento de esa política, anunciada ayer por los gobiernos de México y de Estados Unidos.

“Apoyamos el trabajo del Gobierno de EU a principios de este año para poner fin al programa MPP e instamos a Estados Unidos a continuar con esos esfuerzos, de acuerdo con el reciente memorando emitido por el Departamento de Seguridad Nacional”, precisó.

El organismo dependiente de la ONU señaló su disposición para trabajar con las autoridades para garantizar que las medidas y políticas de gestión de fronteras y de asilo se ajusten al derecho internacional de los refugiados y de los derechos humanos.

Al respecto, los internacionalistas Luz Araceli González Uresti, catedrática del Tec de Monterrey, y César Moreno Morrison, académico de la Universidad La Salle, consideraron que existe un pensamiento antiinmigrante que permea en decisiones como las de una corte estadounidense que provocó la reactivación de la medida.

En entrevistas por separado, consideraron que la reactivación del programa “Quédate en México” obedece a una política migratoria del gobierno de los Estados Unidos que observa el fenómeno migratorio como un tema de seguridad nacional que se antepone a criterios humanitarios, opinaron internacionalistas.

“La política migratoria estadounidense trasciende la voluntad de una sola persona, como puede ser el presidente Joe Biden, que se ha pronunciado por la regularización de 11 millones de migrantes, y en consecuencia, la actividad de este programa va a generar problemas importantes”, explicó González Uresti.

A su vez, Moreno Morrison consideró que “Trump establece el programa. Biden lo cancela mediante medidas ejecutivas mediáticas. Hay un juez que dice que siempre sí y se tiene que llevar a cabo el programa. Lo cierto, es que todos juegan para mismo lado”.
En septiembre pasado, cerca de 15 mil refugiados quedaron atrapados en un campamento improvisado bajo un puente entre Texas, EU y Coahuila, México.Foto: Cuartoscuro
Reactivación beneficia a tratantes: extitular de INM

El excomisionado del Instituto Nacional de Migración (INM), Tonatiuh Guillén López aseguró que aceptar “Quédate en México” es un tache para nuestro país porque beneficia más a los tratantes de personas, en tanto que la activista Eunice Rendón destacó que entre 2018 y 2020 periodo en el que se instrumentó ese programa, más de 70 mil personas permanecieron atrapadas en seis puntos fronterizos y fueron víctimas de abusos.

Guillén López dijo que “el tráfico de personas es realmente el responsable de la movilidad y es el gran ganador, pero con palabras enormes, de nuestra dificultad para coordinar un sistema en esta materia. El gran interesado en que esto no funcione son los traficantes de personas”.

Durante la Conferencia Anual Migración, Límites y Fronteras del Colegio de México y el Instituto Matías Romero, Guillén destacó que México debería ser parte de la solución en los procesos de refugio, en lugar de contribuir a “torturar a la gente en la movilidad, que además, es aprovechada por el tráfico de personas cuando esto sucede en condiciones tan precarias”.

“Ahora van a reactivar el ‘Quédate en México’, mal, tache, porque no está pensado en una estructura regional amplía, el proceso de refugio también se tiene que pensar con otras estrategias, con otras dinámicas, incluso contemplando que empiezan los procesos desde Centroamérica, si es el caso, o en la frontera sur de México”, afirmó durante su participación en el panel de Gobernanza global de la migración.

El ex comisionado del INM consideró que la estrategia antimigración que implementó el ex presidente estadounidense, Donald Trump, influyó y marcó la política migratoria de nuestro país, ya que debido a esto, se permitió que la Guardia Nacional tuviera un rol en los controles migratorios.

“El gobierno de Trump se trazó en cerrar a Estados Unidos a la inmigración y refugio, y nada más emblemático que el famoso muro, pero no solo eso, era toda una estrategia conjunta, amplia, que implicó influir sobre la política migratoria mexicana y de los propios gobiernos centroamericanos”, refirió.

Agregó que hasta ahora ha sido la estrategia más regional que se ha dado para atender la migración en América Latina, sin embargo, resaltó que ha sido una política negativa, porque solo se enfoca en la “anulación de los flujos migratorios y de las posibilidades de refugio, sobre todo de las personas que llegan a Estados Unidos”.

“Lo más regional que hemos visto en los últimos tiempos y creo que del lado negativo fue la influencia del gobierno de (Donald) Trump sobre el conjunto de la región, esa política, sí efectivamente, empezó a establecer hilos de continuidad, de impacto, evidentemente, en Estados Unidos se trazó una estrategia y políticas muy crudas sobre migración y refugio”, dijo.

La directora de Agenda Migrante, Eunice Rendón Cárdenas explicó que por medio del programa “Quédate en México”, entre 2018 y 2020 más de 70 mil personas permanecieron atrapadas en seis puntos fronterizos de México, lo cual “fue inhumano” ya que de acuerdo con Human Rights Watch cerca del 80 por ciento sufrió algún tipo de abuso mientras estaba a la espera de una respuesta.

“Entre 2018 y 2020 más de 70 mil personas estuvieron varadas en seis puntos fronterizos de México bajo el programa de #PermaneceenMéxico. Esto fue inhumano, según @hrw más del 80 por ciento sufrieron algún tipo de abuso en esta espera”, escribió en su cuenta de Twitter.

Refirió que sólo cinco por ciento del total de las solicitudes que se registraron fueron otorgadas, por lo que algunos migrantes tuvieron que ingresar ilegalmente a Estados Unidos, continuar en México o regresaron a sus países de origen.

Agregó que los tiempos de espera de este programa implementado por Trump fueron prolongados y “se violó el debido proceso de muchos de los migrantes”.

En lo que va de este año, agentes del Servicio de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés) han detenido en la frontera con nuestro país a 1.7 millones de migrantes.

Con información de Yazmín Veloz y Daniela Gómez

Ámbito: 
Nacional
Tema/Categoría: