El recorte presupuestal que año tras año se le realiza a la CONANP pone en peligro a las Áreas Naturales Protegidas del país, las cuales atraviesan ya por una situación crítica ocasionada por los cambios ilegales del uso de suelo, el turismo masivo, la extracción desmedida de recursos y las actividades ilícitas
Las 182 Áreas Naturales Protegidas (ANP) del país peligran debido a una crisis de malos manejos, falta de coordinación, y de planes de conservación que se quedan en el papel. La crisis se podría agravar el siguiente año luego de que el Presupuesto de Egresos de la Federación (PEF) para 2022, aprobado el pasado 14 de noviembre por la Cámara de Diputados, para la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) encargada de las ANP, presenta un recorte de más de 20 millones de pesos.
El recorte presupuestal del 1.2 por ciento para este año es la cereza del pastel de una disminución de casi el 90 por ciento en el último lustro, que comenzó en 2016 durante la presidencia de Enrique Peña Nieto y que continúa durante la actual administración.
Con los 887 millones 345 mil 822 pesos que tendrá para el 2022 el organismo encargado de la protección, manejo y conservación de las ANP, solamente contará con 9.7 pesos por hectárea durante todo un año, situación que fue duramente criticada por el Centro Mexicano de Derecho Ambiental (CEMDA) y otras organizaciones de protección al medio ambiente.
“El aumento de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) que tendrá para 2022 (del 27.5 por ciento) no alcanzó para las 182 Áreas Naturales Protegidas que tendrán un recorte del 1.2 por ciento y que abarcan el 22 por ciento del territorio nacional (…) 9.7 pesos por hectárea no alcanzan para proteger nuestro futuro.
“Es evidente, que al igual que en sexenios anteriores, la conservación de los ecosistemas y la biodiversidad sólo está en el discurso. El mantenimiento del patrimonio natural del país no es de importancia para esta administración”
CEMDA
Del otro lado de la moneda y pregonando por la conservación del medio ambiente, el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció el pasado domingo que consultará si el Lago de Texcoco, lugar en donde se construiría el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM), debería de ser declarado Área Natural Protegida
“Se llevará a cabo una consulta con los pueblos para declarar 14 mil hectáreas —10 mil de la zona federal y cuatro mil de la propiedad social— como Área Natural Protegida (…) Miren los patos que no vieron los ambientalistas, nunca protestaron cuando se iba a llevar a cabo esta construcción, no hubo amparos, porque los tenían muy apergollados a todos, a los ambientalistas”, criticó el político tabasqueño.
‘Ni para gasolina’ en la CONANP
Durante la discusión del Presupuesto de Egresos de la Federación, la Comisión de Medio Ambiente y Recursos Naturales de la Cámara de Diputados propuso recortar el 0.5 por ciento de los recursos asignados al Programa de Gestión Integral y Sustentable del Agua, para incrementar 22 millones de pesos al presupuesto de la CONANP. Sin embargo, durante la votación en el pleno, la propuesta fue rechazada.
De esta manera, el proyecto quedó tal y como lo propuso el Ejecutivo federal recortando dinero de capítulos claves para las Áreas Naturales Protegidas, como el 2000. Materiales y suministros; Capítulo 5000. Bienes muebles, inmuebles; y el 3000. Servicios generales.
Para el próximo año, cada una de las Áreas Naturales Protegidas del país contarán con tan sólo 251 pesos mensuales para la adquisición de herramientas y refacciones para el mantenimiento de vehículos, 5 mil 500 pesos mensuales para combustible, y ningún peso para la adquisición de nuevos vehículos, equipos de transporte, compra de mobiliario y equipo de administración.
Situación que fue duramente criticada por el grupo de organizaciones medioambientales de la sociedad civil NOSSA.
“El presupuesto proyectado para las ANP en 2022 no garantiza su operación y manejo efectivos. Esto muestra la escasa participación del Gobierno federal en un asunto prioritario y un derecho constitucional: garantizar el derecho a un medio ambiente sano”, concluyeron en el informe “Cuidar lo que importa. Presupuesto para el ambiente 2022”.
A mediados de este año el comisionado de la CONANP, Roberto Aviña Carlín, externó en el foro “Avances y retos de las Áreas Naturales Protegidas” en el Senado de la República, que se necesitan al menos 74 pesos por hectárea para cubrir idealmente la protección de las áreas naturales del país, un monto 8 veces mayor que el presupuesto del próximo año.
Recortes a PROREST
El Grupo NOSSA (Noroeste Sociedad Civil para la Sustentabilidad Ambiental) alertó que los recortes a la CONANP afectarán a varios programas, entre ellos, el Programa para la Protección y Restauración de Ecosistemas y Especies Prioritarias, (PROREST) que solo contará con 2 pesos por hectárea para realizar las tareas de conservación, restauración y vigilancia que debe de realizar.
“Los recursos para este programa son insuficientes para implementar acciones de conservación y restauración ecológica, así como para controlar y erradicar especies invasoras, realizar monitoreo biológico y elaborar e implementar los planes de manejo correspondientes. Lo que daría como resultado pérdida de hábitat, aumento de la vulnerabilidad de especies en riesgo o en peligro que viven en estos sitios, deforestación, caza ilegal, etc”, señalaron integrantes de NOSSA a Reporte Índigo.
Los especialistas además recordaron que el presupuesto para las ANP debe de utilizarse para cumplir con los objetivos del Programa Nacional de Áreas Naturales Protegidas 2020-2024 y con el recorte es muy complicado que se cumpla.