Desde el 13 de septiembre 2013, luego del desalojo del campamento que instalaron los maestros en la Plaza de la Constitución y sus alrededores, la administración de Miguel Ángel Mancera les había impedido su ingreso; aunque hace ocho días se les colaron algunos maestros, quienes protestaron frente a Palacio Nacional.
Ayer la marcha de los disidentes, que salió del Auditorio con dirección al Zócalo capitalino, fue detenida por el Grupo de Granaderos de la Secretaría de Seguridad Pública sobre la Avenida Juárez, justo frente al Palacio de Bellas Artes.
Pero luego, tras casi 30 minutos de negociaciones, los granaderos rompieron filas y permitieron el ingreso de los casi 2 mil disidentes, según cálculos de la SSP, al Zócalo capitalino.
Caminaron por la calle 5 de Mayo hasta llegar al circuito de la Plaza de la Constitución. Los disidentes iban en hilera horizontal, sujetados de los brazos, unos con otros, para abrirse paso.
Gritaban “¡Zócalo!, ¡Zócalo!, ¡Zócalo!”, mientras avanzaban.
Delante de ellos, un camión que en el toldo cargaba unas bocinas, en las que se escuchaban las consignas de los dirigentes.
“¡Señor policía, qué lástima me das teniendo tú las armas no puedas protestar!” y “¡Con el pueblo muy chingones, con el narco maricones!”, eran algunas.
Oradores afirmaron durante la caminata que la CNTE se encuentra en una guerra involuntaria que ha sido declarada por el Gobierno federal contra el magisterio.
Víctor Rodríguez, del Magisterio Mexiquense contra la reforma educativa, informó que además hoy permitieron el libre paso en la caseta San Marcos y en una caseta de Querétaro.
En la movilización participaron maestros de Chiapas, Oaxaca, Michoacán y Guerrero, así como pequeños contingentes de Colima, Guanajuato, Morelos y Nuevo León.
Con el fin de no afectar la Aldea Digital, elementos de tránsito cercaron las carpas para proteger a los visitantes y no alterar el orden.
CAÓTICO MIÉRCOLES. Los silbatos de los policías no lograron acelerar el tránsito. Por eso los claxonazos y recordatorios familiares se escucharon al mismo tiempo en que un automovilista insultaba a los manifestantes.
“Acá no vengan con sus jaladas, vayan a su pueblo; no ven el desmadre que hacen”, gritó el conductor desde la ventana de su vehículo.
Sobre Paseo de la Reforma se observaron largas filas de autos, falta de respeto a los señalamientos viales por parte de automovilistas y hasta vehículos circulando en contra sentido en algunas calles aledañas.
Por lo pronto, Facundo Martínez y miles de usuarios llegaron tarde a sus clases y trabajo.
“No sé qué pidan, pero de que nos parten el queso, nos lo parten”, dijo resignado el joven que trabaja de mesero en la Zona Rosa.
Por la protesta fue cerrado un carril de Avenida Paseo de la Reforma, desde el Auditorio hasta la Estela de Luz.
“¡Aquí y ahora, con la Coordinadora!”, gritaban los inconformes mientras los automovilistas desquiciados accionaban su claxon, en señal de desaprobación.
Debido a las movilizaciones de la CNTE no se dio servicio en 9 paradas de la línea 3 y 4 del Metrobús, siendo Delegación Cuauhtémoc, Puente de Alvarado, Museo de San Carlos, Plaza de la República, Glorieta de Colón, Expo Reforma, Vocacional 5, Mina e Hidalgo.
Esto provocó molestia en los capitalinos que pretendían usar dicho transporte público, muchos de los usuarios afirmaron que están hartos de las movilizaciones que constantemente llevan a cabo los maestros en la capital.