El embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar, anunció un muro en el Istmo de Tehuantepec para facilitar el monitoreo y el control migratorio, así como el tráfico de drogas, con lo que concentrarán en 300 kilómetros los esfuerzos de vigilancia en una frontera que supera los 3 mil.
Ayer en conferencia reveló el plan del gobierno mexicano para blindar esta zona del sur, porque, afirmó, ahí está la llave para resolver los problemas comunes y frenar a los migrantes y el contrabando de estupefacientes que se dirigen a la frontera norte.
“El gobierno de México tiene un plan, una agenda muy buena para la seguridad por ahí, por el Istmo de Tehuantepec. Allí, en el Istmo, por 300 kilómetros, 180 millas, es más fácil ver lo que está pasando en la frontera de 180 millas y no de 2 mil millas en el desierto, entonces es parte de la solución de migración. También es parte de la solución de la seguridad”, aseguró.
En la residencia oficial de Estados Unidos en el país, el diplomático detalló que el planteamiento es que en esa pequeña región se facilitará el monitoreo y el control. Consideró de vital importancia poner la mira ahí, ya que, en su opinión, en ese lugar se encuentra la clave para resolver los problemas compartidos entre ambos países ante la actual crisis migratoria y de contrabando de drogas.
“En el sur, por el Istmo, es importante que pongamos la vista allí. Ahí están las llaves para resolver los problemas que tenemos ahora sobre el flujo de la migración al norte”, abundó en embajador.
Asimismo, Salazar subrayó que, desde que llegó a México en septiembre pasado, su atención se ha centrado en atender y fomentar las inversiones bilaterales en esa región, las cuáles, rememoró, llevan décadas estancadas. Confió en que con estas acciones se fortalecerá la integración económica de ambas naciones.
“Mi foco ha sido en el Transoceánico… ese lugar se soñaba como muy estratégico desde los días de (Benito) Juárez y (Abraham) Lincoln, y con las inversiones que se hicieron ahí, pues sí se hizo un ferrocarril, pero se abandonó.
“Entonces, México ha hecho bastante para invertir en ese corredor y en los dos puertos de Salina Cruz y de Coatzacoalcos, y esto tiene una ventaja grande para la integración económica.
“Esto porque ahí se abren las oportunidades por todo el Golfo (de México), (a partir) del puerto de Mobile, Alabama, pero también por el este de Estados Unidos hasta Nueva York y para adelante”, explicó.
El diplomático calificó de positiva la quinta reunión con gobernadores del sur que sostuvo el jueves en la Ciudad de México y en la que también participó el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O.
“Fue un día muy bueno porque, por primera vez, estamos viendo en conjunto Estados Unidos y México las oportunidades que tenemos en el sureste mexicano para la seguridad, la prosperidad y también para ayudar con el flujo de migrantes que estamos viendo llegar por México, llegar por la frontera al norte.
“Ahí se ve la realidad de que estamos trabajando bien, el gobierno de Estados Unidos y el gobierno de México, para resolver problemáticas que tenemos, pero más importante, crear oportunidades para nuestros pueblos”, manifestó.
El jueves pasado, junto con el titular de Hacienda, informó que las inversiones destinadas a proyectos de infraestructura en los estados del sureste ascienden a 30 mil 500 millones de dólares.
Se puntualizó que 4 mil millones son para trenes, 4 mil 400 para aeropuertos, 10 mil 200 para carreteras, 10 mil 500 para refinerías, mil 100 para proyectos de puertos marítimos y 300 millones de dólares para modernización en las aduanas.