Los constantes tiroteos podrían hacer del 2022 el año más sangriento para la Unión Americana, un problema que requiere de medidas urgentes y de la participación tanto de los políticos como de la ciudadanía y los líderes de opinión para enfrentarlo
En los últimos meses, Estados Unidos se ha caracterizado por algo en particular: el registro de tiroteos masivos de manera constante.
De acuerdo con la organización sin fines de lucro Gun Violence Archive (@GunDeaths) en lo que va de 2022 van registrados 248 tiroteos, el más reciente detectado el 7 de junio en Portsmouth, Virginia, y el primero el 1 de enero en Denver, Colorado.
Si los números continúan así, este año podría superar a 2021 en cuanto a balaceras, por lo que el gobierno federal del presidente Joe Biden (@POTUS) pide un cambio radical.
De acuerdo con el líder demócrata, es esencial que el Congreso apruebe leyes que refuercen la compra y ventas de armas de fuego. Sin embargo, debido a la ideología de los políticos más conservadores que integran los escaños, eso está lejos de alcanzarse.
Y aunque el tema del control de armas ha liderado en toda la Unión Americana, especialistas de la @UNAM_MX aseguran que es poco probable que sea el rubro que lidere la agenda política de cara a las elecciones legislativas.
Para ellos, es la inflación y la economía lo que más resaltará en noviembre próximo, dejando los tiroteos masivos y el control de armas en un tema a heredar para la siguiente administración.
Sin embargo, con ello no se prevé que el tema vaya a ser olvidado, sino todo lo contrario, se espera que tanto los políticos como los representantes de la opinión pública lo coloquen sobre la mesa para luchar por un mejor país, lejos de los tiroteos constantes.
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