Ulises Sotelo González, recién designado titular del Consejo de Vigilancia de la Entidad Superior de Auditoría y Fiscalización (ESAF) enfrenta un conflicto de interés para ocupar dicho cargo, pues desde el 2019 enfrenta una investigación en el mismo órgano que ahora vigilará, por supuestas irregularidades cuando fue encargado de despacho de la Auditoría estatal, afirmó la diputada Paola Cruz Torres.
La coordinadora del grupo parlamentario de Movimiento de Regeneración Nacional (Morena) sostuvo que el citado nombramiento fue un “madruguete” más del denominado G-11, pues el acuerdo votado el pasado martes por 12 diputados no fue consensado con los veinte legisladores.
“Es lamentable que cuando estamos en estas pláticas, en esta vía de conciliación y negociación, de repente den otro albazo, porque fue algo que nunca se platicó en las mesas que hemos tenido y que ya se iba a hacer. Es un tema que deja mal sabor de boca y un golpe para el otro grupo, que nunca se nos consideró”, dijo.
De acuerdo con la diputada morenista, los integrantes del G-11 impusieron a Ulises Sotelo en el Consejo de Vigilancia para influir en el trabajo que realiza la ESAF, pues recordó que desde el año pasado buscaron reestructurar dicho organismo.
“Además, tiene conflicto de interés, pues al dejar su cargo como encargado de despacho de la ESAF no hizo el debido proceso de entrega-recepción y tiene un proceso al interior del Consejo de Vigilancia, es decir, que hay un conflicto de interés porque está siendo investigado por esos años y ese momento, ni siquiera tiene la probidad ni la idoneidad para ocupar el cargo”, manifestó.