Cd. de México (13 agosto 2016).- Tras el distanciamiento apreciado el jueves pasado entre el Presidente Enrique Peña Nieto y el Gobernador de Veracruz, Javier Duarte, el Mandatario estatal afirmó ayer que no existe ningún rompimiento con los miembros de su partido.

"No existe rompimiento ni fricción, al contrario, hay coincidencia plena en todo lo que mi partido hace, siempre respetando la ley", dijo Duarte a medios durante una gira de trabajo a Zilacatipan, comunidad del Municipio de Huayacocotla, afectado por la tormenta "Earl".

"Más que deber algo, me siento satisfecho del trabajo que he realizado como funcionario, como representante popular que soy, como titular del poder Ejecutivo del estado, tengo que respetar la ley y sobre todo ordenamientos de índole política y, en ese sentido, hasta donde me permita la ley, contará siempre mi partido con mi apoyo.

"Respeto y apoyo las decisiones de mi partido, y como miembro que soy, como consejero político nacional que soy de mi partido, siempre estaré muy atento de cualquier directriz", asentó.

A raíz de la derrota electoral del pasado 5 de junio y envuelto en acusaciones por enriquecimiento ilícito, Duarte fue mal visto en Los Pinos y por los priistas, que hasta se deslindaron de él.

Luego de que el Mandatario intentara protegerse con recursos legales, la PGR emprendió acciones de inconstitucionalidad contra los Gobiernos de Veracruz y de Quintana Roo.

El jueves, en un hecho insólito, el Gobernador veracruzano no recibió al Presidente de la República en el aeropuerto y sólo hubo un frío acercamiento en el helipuerto que se habilitó en la Escuela Naval Militar.

Los Secretarios de Marina y de la Defensa, así como la titular de Inmujeres, fueron los responsables de dar la bienvenida oficial en la terminal aérea.