En Morelos, el relevo de los cargos políticos entre integrantes de familias es una costumbre que suele ser común
Durante las últimas décadas, en algunos municipios, sobre todo de la región oriente del estado, se volvió común que el poder se concentrara en los integrantes de una sola familia; los cargos políticos eran heredados e incluso intercambiados entre ellos.
Familias como los Alonso, Sánchez Zavala, Pimentel, Guerra, Lezama y Cruz han estado al frente de los puestos de poder durante más de 15 años. Y aún cuando pretenden convertirse en las “nuevas monarquías”, lo cierto es que cada vez hay mayor competencia entre quienes aspiran a ocupar esos puestos.
La llamada herencia del poder ha sido una práctica que nació con la creación del PRI, pero que no a todos les ha funcionado. De acuerdo con Óscar Apáez Godoy, cronista de Cuautla, cuando se fundó el Partido Nacional Revolucionario (PNR) el estado de Morelos aún no contaba con su orden constitucional; fue en 1930 cuando se promulgó la constitución local y con ello llegaron los primeros gobernadores, como Vicente Estrada Cajigal y Refugio Bustamante.
Desde entonces empezaron a surgir las familias políticas, primero perteneciente al PNR y posteriormente al Partido Revolucionario Institucional (PRI).
"Para llegar al poder no había otra forma más que pertenecer al PRI siendo militante, pues a quien postulaba este partido era quien ganaba; los otros partidos los utilizaba el Estado Mexicano como legitimadores para que ante el mundo se viera que había partidos opositores, pero nunca ganaron nada.
“En Morelos, ningún político llegaba al poder sin que fuera del Partido Revolucionario Institucional, por lo que las familias políticas tenían que buscar cobijo en este partido, y lo hacía, primero, ofreciendo sus casas para que se instalaran las oficinas del partido a cambio de que se designara a un miembro de su familia como presidente municipal, diputado local o hasta diputado federal”.
Las familias con poder
En el estado es muy sencillo identificar a las familias que han logrado heredar trienio tras trienio el poder entre sus integrantes, tal es el caso del municipio de Yautepec, con los Alonso, cuyo padre heredó el cargo de alcalde a su hijo mayor, luego lo recuperó y ahora busca posicionar a su hijo menor.
Agustín Alonso Mendoza ha sido presidente municipal en tres ocasiones 2003-2006, 2012-2015 y actualmente se encuentra en el cargo.
En 2015 le pasó la estafeta a su hijo Agustín Alonso Gutiérrez, quien de 2016 al 2018 fue alcalde por primera vez y posteriormente repitió en el cargo al ganar la reelección para el periodo 2019-2021; actualmente es diputado local por el distrito XII con cabecera en Yautepec.
Ahora, se puede ver como Agustín Alonso Mendoza está impulsando a su menor hijo, Eder Alonso, quien actualmente funge como secretario técnico del Ayuntamiento de Yautepec, pero a quien busca posicionar para ser el próximo alcalde.
Un poco más abajo se encuentra el municipio de Yecapixtla, donde los Sánchez Zavala han llegado en varias ocasiones a la Alcaldía. Se trata de Irving, Francisco y Heladio Rafael.
Esto fue posible gracias a quien encabeza la dinastía: Francisco Rafael Sánchez Vargas, quien fue alcalde de Yecapixtla en el periodo 1991-1994 por el PRI, para posteriormente ocupar una curul en el Congreso del Estado.
No obstante, fue hasta el periodo 2009-2012 que uno de sus hijos logró ganar la alcaldía: Irving Sánchez Zavala, y en el trienio 2016-2018 regresó la familia Sánchez Zavala con Francisco Erik, electo alcalde por el Partido Acción Nacional (PAN), y posteriormente, logró la reelección al cargo para el periodo inmediato de 2019 a 2021.
"Paco Sánchez" actualmente es diputado local por el IV Distrito, pero heredó el poder a su otro hermano, Heladio Rafael Sánchez Zavala “el gallo”, quien actualmente es el presidente de Yecapixtla.
En Ayala, los Pimentel han sido también una familia que ha buscado permanecer en el poder, pues basta ver a Isaac Pimentel Rivas quien fue presidente en el periodo 2009-2012; anteriormente, su hermano Pedro Pimentel ocupó este mismo cargo en el trienio 2003-2006, y finalmente Isacc Pimentel Mejía, hijo y sobrino, respectivamente, ganó las elecciones para la alcadía de Ayala en el periodo del 2019-2021, logrando la reelección para el 2022-2024.
Al respecto, el cronista Óscar Apáez, asegura que la situación en Cuautla es diferente; ahí no existe un cacicazgo; “podemos hablar de familias en el poder, pero donde nada más un integrante de ellas ha logrado ocupar un cargo como los Nava, o los Llera, con don Raymundo Llera Peña, quien fue presidente municipal, pero no hay un cacicazgo como tal, se decía que en este municipio había una 'dictablanda' del PRI, es decir, a quien ponían ellos, esa persona ganaba".
Sin embargo, surgen algunas familias que han buscado el poder, y aunque han ocupado algunos cargos, no han sido de primer nivel, como los Lezama, cuya familia pertenece a las filas del Partido Acción Nacional (PAN), y aunque varios de sus miembros han pretendido llegar a la presidente municipal no la han obtenido, en cambio han logrado regidurías y diputaciones, pero por representación proporcional.
Otra familia son los Rosales, cuyos integrantes han ido ocupando regidurías por Movimiento Ciudadano, heredándolas entre ellos mismos.
La herencia en la política es una práctica muy común en algunos municipios del estado de Morelos, ya que no solamente en la región oriente se ha podido ver como entre familias se van heredando el cargo entre ellos mismos para seguir manteniendo el control.