El alcalde José Luis Urióstegui destacó avances en seguridad, pero las cifras revelan que se vive una de las peores crisis en esta materia.
Ante poca asistencia de ciudadanos de Cuernavaca y en un evento desangelado, el alcalde, José Luis Urióstegui Salgado rindió su primer informe de Gobierno en la Plaza Solidaridad plagado de mentiras e imprecisiones.
En los primeros minutos de su intervención, el edil panista argumentó que la falta de obra pública ha sido por la deuda que heredó de Antonio Villalobos Adán.
Aseguró que en materia de seguridad han disminuido los delitos, no obstante, los asesinatos, robos, secuestros y demás delitos siguen a la alza.
Este martes 13 de diciembre Abraham Blanco, uno de los líderes de la colonia Lagunilla fue asesinado.
Asimismo la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) que elabora el INEGI reveló que ocho de cada 10 personas dicen sentirse inseguras en la capital morelense.
En los primeros 10 meses de 2022 se cometieron en Cuernavaca 138 homicidios dolosos, el 16% de los cometidos en toda la entidad.
El alcalde dijo que sean rescatado vialidades con recursos propios y que se pavimentaron calles y avenidas dentro del programa de mejoradas que se implementó al inicio de su administración.
Sin embargo, en este rubro, la ciudadanía tiene otra percepción ya que constantemente suben a redes sociales quejas del mal estado de las vialidades.
Aseguró que en su gobierno se dan espacios y apoyos para todos los sectores, pero olvidó mencionar que elementos de seguridad de Cuernavaca detuvieron a un grupo de feministas que derivó de unas disculpas publicas.
Dijo que en su gobierno no habrá corrupción, pero de nueva cuenta olvidó comentar lo que sucedió con la caída del puente del Paseo Ribereño, el cual colapsó por malos manejos, dejando grave a una regidora quien denunció al ayuntamiento.