Diversas autoridades, como la FGR, ya indagan el asesinato de cinco jóvenes en Nuevo Laredo para determinar la veracidad de los hechos, asegura la dependencia
Tres días después de que cinco jóvenes murieron en Nuevo Laredo, cuando la camioneta en la que viajaban fue baleada presuntamente por militares, la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) dio a conocer su versión, en la que reconoce que “personal militar accionó sus armas de fuego”, mientras que la Fiscalía General de la República (FGR) informó que abrió una carpeta de investigación sobre el caso.
De acuerdo con la información difundida por la Sedena, “aproximadamente a las 04:50 am del domingo 26 de febrero de 2023, el personal militar de una base de operaciones desplegado en Nuevo Laredo, Tamaulipas, realizaba reconocimientos en el área urbana de ese municipio, en apoyo a la estructura de seguridad pública, cuando oyeron disparos de armas de fuego, poniéndose en alerta, avanzando a la dirección donde se escucharon; posteriormente, visualizaron un vehículo tipo pick up con siete individuos a bordo, quienes se trasladaban a exceso de velocidad con las luces apagadas y sin placas, cuyos integrantes, al observar la presencia de las tropas, aceleraron de manera intempestiva y evasiva, deteniendo su marcha al impactarse después con un vehículo que estaba estacionado.
“De esta situación, al escuchar un estruendo, el personal militar accionó sus armas de fuego, suceso que actualmente diversas autoridades se encuentran investigando para determinar la veracidad de los hechos”.
La dependencia no aclara si los elementos que accionaron sus armas dispararon contra la camioneta en que viajaban los jóvenes, una pick up blanca de modelo reciente que presentaba al menos 10 impactos de bala en el parabrisas, lo que indica que le habrían disparado de frente. Tampoco informa si se encontraron armas en el vehículo.
Llama la atención que el Ejército reporta que siete hombres viajaban en la camioneta y uno resultó ileso, cuando todas las versiones que se habían manejado daban cuenta de seis: cinco muertos y un herido.
De acuerdo con la Sedena, en el lugar observaron a una persona ilesa, una herida y cinco sin vida, y se pidió “apoyo de una ambulancia” para trasladar al herido.
Agregó que —a raíz de estos hechos— se trabaja en coordinación con la FGR para colaborar con las investigaciones y diligencias para la integración de la carpeta de investigación; con la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH), para facilitar sus investigaciones, y con la Fiscalía General de Justicia Militar, “por lo que concierne a las acciones desarrolladas por parte del personal involucrado en el ámbito del fuero militar”.
Añadió que mantienen “diálogo abierto” con las familias “para brindar las atenciones que corresponden en este tipo de casos”. Por su parte, la FGR abrió una carpeta de investigación por la muerte de los cinco jóvenes.
Derivado de la denuncia presentada el lunes por familiares de las víctimas, el Ministerio Público de la Federación inició las diligencias correspondientes para deslindar responsabilidades, las cuales incluyen entrevistas a los familiares, testigos y personal de la Defensa Nacional que participó en los hechos del fin de semana en los que murieron Gustavo Pérez Beriles, Wilberto Mata Estrada, Jonathan Aguilar Sánchez, Alejandro Trujillo Rocha y Gustavo Ángel Suárez Castillo, de nacionalidad estadounidense.
La CNDH confirmó el inicio de una queja de oficio por los acontecimientos en Nuevo Laredo. “Este organismo realizará las labores de investigación que la ley le faculta, con toda seriedad y responsabilidad, como lo ha hecho en otros casos mediáticos, y cuando cuente con todos los elementos necesarios emitirá los pronunciamientos que resulten pertinentes”, dio a conocer a través de un comunicado.
La otra versión
La primera versión de los hechos, que recoge los testimonios de testigos y familiares, difundida por la organización Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, señala que los jóvenes habían salido la madrugada del domingo de una discoteca y, cuando circulaban en la colonia Manuel Cavazos Lerma, los militares dispararon contra ellos, por lo que el conductor chocó con un vehículo estacionado.
En un comunicado, la ONG indicó que “vecinos del sector aseguran que al menos dos jóvenes fueron rematados con disparos en la nuca estando tirados sobre el pavimento”.
Gente del lugar declaró a medios de comunicación que escucharon los disparos y luego los militares les impidieron salir de sus casas.
En fotografías del lugar de los hechos se observan disparos de armas de grueso calibre en la fachada de una casa.
Ayer, el comité informó a EL UNIVERSAL que los cuerpos de los cinco jóvenes muertos ya habían sido entregados a sus familiares. Uno fue trasladado al municipio de Hidalgo, en Coahuila, y los otros cuatro eran velados anoche en Nuevo Laredo.
Sobre el herido, identificado como Luis Gerardo, la ONG dijo que “niega la versión del Ejército de que escucharon disparos”.