Tras más de cinco años de permanecer cerrado por el sismo, el Palacio de Cortés abre sus puertas con nuevas salas.
Después de casi cinco años de permanecer cerrado reabre sus puertas a los visitantes el Palacio de Cortés, ahora bajo el nombre de Museo Regional de los Pueblos de Morelos.
Víctor Hugo Valencia Valera, director del Centro INAH Morelos, recordó que el Palacio de Cortés fue uno de los 259 inmuebles culturales que resultaron afectados en Morelos, por lo que, tras aplicarse los recursos para la restauración, finalmente abrió sus puertas, pero de manera parcial.
“El mural de Diego Rivera resultó gravemente dañado y fue de la última etapa que se atendió en coordinación con el Instituto Nacional de Bellas Artes, pero ya quedó listo después de resultar muy afectado, casi se desprendía el soporte de la pintura de la pared”, declaró.
De los dos mil metros de construcción que tiene el ahora Museo Regional de los Pueblos de Morelos, actualmente estará abierto al público solo entre el 30 y 40 por ciento, “la restauración de este inmueble ha sido un reto, nada más el torreón, quedó quebrado, pesaba 44 toneladas y, hoy pesa solo dos toneladas”.
Por su parte, Diego Prieto, titular del INAH explicó que anteriormente se llamaba Museo Regional Cuauhnáhuac y, ahora será Museo Regional de los Pueblos de Morelos porque, aunque es uno de los destinos favoritos de la ciudad capital, el museo es un referente de todo el estado que expresa la diversidad y las luchas de los pueblos de Morelos.
Sin mencionar la inversión que se ha realizado, aseguró que entre las novedades que tendrá serán cinco salas nuevas, hacen falta varias salas, pero quedarán listas en los siguientes meses, “será un museo en el que se vayan rotando distintas exposiciones. Habrá una exposición temporal sobre el impacto de los sismos en el Palacio de Cortés y en el estado de Morelos, es una muestra de la catástrofe que se registró y de la que apenas vamos saliendo.
Por su parte, el Gobernador Cuauhtémoc Blanco Bravo celebró y reconoció el trabajo que ha realizado el INAH, para lograr la rehabilitación y reapertura del emblemático Palacio de Cortés, “es un imponente símbolo de Cuernavaca, es uno de los elementos arquitectónicos más bellos y característicos de la entidad, su estructura es un reflejo de la fortaleza de nuestra tierra.