Los inconformes, quienes protestaron en las instalaciones del municipio y provocaron que la sesión de Cabildo se realizara a puerta cerrada, resguardada la sesión por elementos del Mando Único, señalaron que desde el Ayuntamiento se protege a varios establecimientos comerciales.
En voz del ex director de Gobernación y Normatividad del municipio de Cuernavaca, Edgar Contreras McBeath, comentó que fue despedido junto con Daniel Pérez Cárdenas, quien era jefe de inspectores, porque habían amenazado con llevarse presos a los 40 inspectores porque no estaban dados de alta, argumentando que no eran empleados.
"Había inspectores que desde hace cuatro meses laboraban con nosotros y estaban aprobadas sus plazas, pero con el cambio constante del secretario general del Ayuntamiento, no se regularizaron sus plazas, ahora con ese pretexto se les quería detener, argumentando que portaban sus gafetes del Ayuntamiento sin ser empleados, cuando ellos realizaban los trámites correspondientes".
Lamentaron que esta administración, "ve a la ciudadanía de primera y de segunda, porque aplica la ley a su modo, es decir, a los establecimientos de la elite política y a los mortales les aplica dos leyes distintas, (...) clausuramos el estacionamiento del restaurante "Los Vikingos" por no contar con la licencia, nos regañaron que como lo habíamos hecho si ahí iba la elite política".
Otra de las anomalías detectadas, dijo Contreras McBeath, "fue que en la Plazuela del Zacate en donde con una misma licencia, operaban cuatro establecimientos, igual se nos regañó por hacer nuestro trabajo", asimismo señalaron que el director general de Gestión Política Santiago Núñez, "empezó a colocar ambulantes en avenida Morelos de Cuernavaca".
Por último rechazó la versión del municipio en el sentido de que se despedían porque "había corrupción en esa área", claro que la hay, "a nosotros que nos comprueben una sola, pero eso no pasará, porque somos gente de trabajo", finalizó.
Es de mencionarse que al término de la sesión de cabido, esperaron sin éxito dialogar con el alcalde Cuauhtémoc Blanco Bravo, mismo que salió escoltado por su seguridad personal y elementos del Mando Único para entrar a su oficina en presidencia, a lo que molestó a los empleados quienes reclamaban el porqué de esa actitud.