Incognitapro

Procesan a cabos por caso Nuevo Laredo

 
Señalan a 4 de homicidio. Ratifican prisión a militares por la muerte de 5 jóvenes
 

 

Un juez federal vinculó a proceso ayer a los cuatro militares que presuntamente asesinaron a cinco jóvenes e hirieron a otro, el pasado 26 de febrero, en Nuevo Laredo, Tamaulipas.

Eduardo Javier Sáenz Torres, Juez del Centro de Justicia Penal Federal de Reynosa, procesó a los imputados por los delitos de homicidio calificado y homicidio calificado en grado de tentativa, dentro de la causa penal 46/2023.

El juzgador también ratificó la prisión preventiva de oficio a los cabos Juan Carlos, Bernardo, Jorge Nicolás y Agustín Cornelio, quienes permanecerán presos en el Campo Militar Número Uno, mientras se tramite este procedimiento penal.

De acuerdo con información del Consejo de la Judicatura Federal, Sáenz Torres también fijó un plazo de dos meses para la investigación complementaria, periodo en que tanto los militares como la Fiscalía General de la República (FGR) reunirán sus respectivos datos de prueba.

En esta diligencia los soldados comparecieron por videoconferencia desde la prisión militar de la Ciudad de México, donde ya estaban internados desde hace más de un mes, procesados por el delito de desobediencia en el fuero castrense.

La madrugada del pasado 26 de febrero, cinco jóvenes fueron asesinados por elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) en la Colonia Manuel Cavazos Lerma, en Nuevo Laredo.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) emitió una recomendación en la que señala que los militares dispararon contra los civiles por una "sospecha".

La CNDH dijo que cuatro elementos dispararon contra el vehículo en el que circulaban las cinco víctimas, sin que hubiera una agresión por parte de los civiles ni una amenaza real en contra de los servidores o de terceros.

La versión contrasta con la difundida por la Sedena, en la que afirmó que los civiles estaban armados.

El subsecretario de Derechos Humanos, Alejandro Encinas, dijo que los jóvenes fueron ejecutados, sin que existieran indicios de que fueran armados ni datos de un enfrentamiento.

"Hay elementos para acreditar que los jóvenes no iban armados y que no había enfrentamiento", señaló Encinas, en una versión distinta a la que difundió la Secretaría de la Defensa Nacional, de que hubo una persecución ya que los jóvenes iban armados.

Según las primeras versiones, al escuchar un "estruendo" los militares involucrados accionaron sus armas.

"Pero independientemente de quiénes eran, fueron ejecutados; no se trató de un enfrentamiento con los jóvenes", refirió en San Lázaro, a donde acudió para dar detalles sobre una nueva Ley de Memoria.

El subsecretario aseguró que la investigación deberá aclarar cómo fue la cadena de mando, si los soldados detenidos obedecieron o no a sus superiores.

Ámbito: 
Nacional
Tema/Categoría: