Por deficiencia probatoria de la Fiscalía General del Estado (FGE), una juez de control ordenó la liberación de Luis Alberto “N”, alias “El Diablo”, quien fue acusado de participar en el homicidio de tres jóvenes que formaban parte del Instituto Nacional de Salud Pública (INSP).
La audiencia se realizó de forma privada y, de acuerdo con los datos recabados por La Unión de Morelos, la juez resolvió la no vinculación del joven imputado, debido a que el agente del Ministerio Público de la FGE no aportó indicios de su presunta implicación en el triple homicidio.
La incriminación de “El Diablo”, a quien la fiscalía estatal vincula como miembro de un grupo delictivo que opera en los poblados de Tres Marías, Parres, Fierro del Toro y en Lagunas de Zempoala dedicada al robo de vehículo, la tala clandestina y el secuestro, habría sido sustentada ante la juez solo con una denuncia anónima.
Es decir, en esta denuncia se habría señalado al joven de 22 años como uno de los autores materiales del feminicidio de Noemí Guadalupe Arias Sosa y el homicidio los hermanos Enrique y Javier García Díaz, trabajadores del INSP.
Sin embargo, durante la audiencia de ayer el Ministerio Público no justificó el modo, la circunstancia y el tiempo en que Luis Alberto “N” habría participado en el secuestro, desaparición y asesinato de los tres jóvenes ni aportó elementos adicionales para sostener la imputación.
Al decretar la no vinculación del sujeto, la juez levantó la medida cautelar de prisión preventiva que se le había impuesto el pasado 21 de abril y ordenó su libertad. Se solicitó a la fiscalía estatal una postura sobre el fallo, pero no hubo respuesta del organismo autónomo.
Previo a la conclusión de la audiencia de vinculación a proceso, el fiscal estatal aseguró que existen al menos otros cinco implicados más en el triple homicidio, perpetrado el pasado 12 de abril cuando los jóvenes regresaban de una consulta médica de la Ciudad de México a Cuernavaca y cuyos cuerpos fueron localizados en un paraje del municipio de Huitzilac.
“Tenemos ahí cuando menos seis personas, cinco persona corrijo (...) Es un grupo de personas que se dedican a actividades ilícitas, no tenemos una denominación concreta para ese grupo delincuencial, es decir, no tienen un nombre, no tienen un mote, sin embargo, están identificados y vamos a ir por ellos”, dijo al señalar que los sospechosos son residentes de la comunidad de Fierro del Toro y operan en los límites de Morelos y Ciudad de México.