Al interior del Heroico Cuerpo de Bomberos de la Ciudad de México se vive una revuelta.
Los apagallamas combaten los incendios que se registran a diario con trajes de protección en mal estado, vehículos sin refacciones y son hostigados por directivos que les exigen ‘moche’ o, de lo contrario, son sancionados con horas extra de trabajo en las centrales que laboran.
Etiquetados como “héroes de carne y hueso” por arriesgar su vida en desastres naturales como sismos, inundaciones y, por supuesto, incendios, los combatientes del fuego viven una crisis por falta de insumos para poder realizar las labores que les corresponden. Un descontento que crece desde hace algunos meses.
Una cuadrilla de bomberos mostró a Reporte Índigo las condiciones en la que laboran en esta temporada en la que se registra históricamente un aumento de los incendios por las altas temperaturas y, en la que resaltan, diversas irregularidades como la falta de presupuesto para acondicionar camiones o comprar equipo nuevo.
“Laboramos en el Heroico Cuerpo de Bomberos en completa precariedad, toda vez que los equipos de protección personal son obsoletos. Las medidas para salvaguardar la integridad física de los bomberos son nulas”, externan los combatientes que ponen en duda el criterio de sus altos mandos y los acusan de ser negligentes.
Los bomberos de la Ciudad de México se dicen inconformes en todos los aspectos y acusan que, además, no son escuchados.
Revelan que los vehículos que manejan no cumplen con los requerimientos que establece la normatividad, por lo que son bombas de tiempo.
“Estos vehículos son unidades adaptadas, no de alto rendimiento, ni eficientes en combates contra incendios”.
Los datos oficiales retratan la titánica labor de los elementos del Heroico Cuerpo de Bomberos: al día atienden un promedio de 100 servicios de emergencias en las 16 alcaldías y llegan a cargar hasta 25 kilos cada uno por todo el equipo de protección que tienen que ponerse.
Los siniestros son diversos: atienden reportes de incendios, fugas de gas, choques, volcaduras, control de abejas en edificios o casas y el rescate de mascotas en domicilios y empresas, entre otros. Es la rutina que cumplen a diario.
Piden investigación
Es tal el hartazgo por la falta de equipo, las malas condiciones y los abusos, que los trabajadores solicitaron una investigación exhaustiva hacia los directores por su actuar.
Alegan que el mando del Heroico Cuerpo de Bomberos ha minimizado las quejas, lo que encendió las protestas aún más.
“Lamentablemente hay ocasiones donde el tiempo de respuesta a los servicios de emergencia es tardado, hay muchas unidades descompuestas; unas por falta de clutch, ausencia de mantenimiento en los frenos o por no tener alguna refacción. También nos hemos quedado parados por falta de combustible”.
Sofocados por la presión
Las condiciones que reportan los bomberos de la capital del país, así como las exigencias salariales no atendidas, generaron encono hacia las autoridades responsables de este Heroico Cuerpo, a quienes señalan de ser omisas para atender sus peticiones y lograr un acuerdo con beneficios comunes.
A pesar de la falta de recursos y equipo en buen estado, los bomberos no detienen su labor ni un solo momento.
Así lo demuestran una serie de fotografías que han tomado por meses varios distintos grupos de bomberos que se las ingenian para atender los llamados de emergencia pese a la falta de condiciones para cumplir con su jornada laboral.
A todos estos problemas, se suma el cobro de una presunta cuota que se les pide a todos los que laboran en las estaciones de bomberos de la capital, de lo contrario, afirman, se les sanciona, imponen horas de arresto o simplemente se les relega de sus funciones.
Si bien el Gobierno de la Ciudad de México prometió resolver el asunto, los bomberos viven a la expectativa, se sienten marginados y nadie los escucha realmente.
El responsable
De esta situación responsabilizan al director general del Heroico Cuerpo de Bomberos de la CDMX, el Primer Superintendente, Juan Manuel Pérez Coba, quien aseguran tiene conocimiento de todas estas denuncias.
“Durante el curso denominado ‘servicios contra incendio’ hubo agresiones directas como hostigamiento, represión, maltrato psicológico, fracturas, desmayos, preinfartos y castigos excesivos bajo la excusa de que eran correctivos disciplinarios para los compañeros”.
Las quejas también incluyen una serie de denuncias por acoso sexual, despidos injustificados e incluso amenazas por pertenecer a algunos de los sindicatos de bomberos.
La falta de una respuesta inmediata a las exigencias se tornó en protestas y solicitudes de ayuda en redes sociales, donde han denunciado a través de escritos, fotos y videos el acoso que existe en contra de los trabajadores que se dedican a esta labor.
Al cierre de esta edición, el equipo de comunicación del Heroico Cuerpo de Bomberos de la CDMX, no dio respuesta a la solicitud de entrevista de Reporte Índigo para conocer la postura de su director respecto a estas acusaciones.
Sueldos ínfimos
A pesar de los riesgos que conlleva ser bombero al exponerse a altas temperaturas y entrar en edificios que están propensos a derrumbarse a causa del fuego, entre muchas otras cosas, los combatientes de incendios apenas perciben un salario mensual que roza los 10 mil pesos y algunas prestaciones de ley.
El sitio gubernamental datamexico.org revela que esta fuerza laboral tiene un sueldo promedio de nueve mil 200 pesos a nivel nacional aunque es un sector que trabaja alrededor de 56.1 horas a la semana, lo que excede la jornada laboral que se establece a nivel nacional que es de 48.
Héctor Barrera, diputado local en el Congreso de la Ciudad de México, dice que propuso
“Hablamos de que exista más capacitación, estímulos, reconocimientos y presupuesto. Constitucionalmente hay que adecuar la norma para incrementar los sueldos de los bomberos de la CDMX, pues son un sector indispensable para la sociedad”, explica en entrevista.
El legislador blanquiazul cuestiona el abandono sistemático que viven los elementos de auxilio desde hace años, por ello, adelanta que buscará — por medio de Puntos de Acuerdo en el recinto de Donceles y Allende— que se garanticen las partidas presupuestales para la correcta operación de todas las centrales de bomberos.
“Estamos hablando de más de dos mil bomberos que atienden las emergencias de una urbe que tiene una población de poco más de nueve millones de personas. Es inadmisible que no cuenten con los recursos necesarios”, precisa el panista.
Bomberas, en llamas también
De los dos mil 147 trabajadores que conforman el Heroico Cuerpo de Bomberos de la capital, 208 son mujeres, para quienes la situación también es muy complicada.
Padecen acoso sexual, descuentos injustificados y hasta cambios de zona por no acatar órdenes directas.
“Nos tienen acuarteladas siempre. Si alguna de nosotras cuestiona algo o se niega a obedecer la cambian de lugar de trabajo con horarios dobles o hasta triples.
“Para nuestro sector las jornadas laborales son más pesadas por motivos que desconocemos”, exponen mujeres que laboran en esta institución a través de escritos y audios a los cuales este diario tuvo acceso.
Por si fuera poco, a diferencia de los hombres, las bomberas y personal administrativo perciben un sueldo menor a pesar de que realizan las mismas funciones al interior de estos centros de trabajo.
A esto se suman agresiones sexuales que han presenciado mujeres que atienden las llamadas de emergencia.
A pesar de que han denunciado, aseguran que existe un pacto de silencio para acallar estas situaciones que se presentan en casi todas las centrales del Heroico Cuerpo de Bomberos.