De acuerdo con lo que narró Javier Jiménez del Frente "Francisco Villa" -testigo del desalojo en la madrugada-, al filo de las 3:30 horas arribaron cerca de 400 elementos de la policía del Mando Único y solicitaron al grupo que ahí estaba que se retiraran porque no podían permanecer en el lugar.
Ante el numeroso grupo de agentes policiacos, los inconformes decidieron retirarse por voluntad propia para no poner en riesgo a las personas que se encontraban ahí, por lo que los agentes retiraron las mantas, cartulinas, mesas, cafeteras, asegurando que sería remitido ante el agente del Ministerio Público.
Derivado de este hecho, al filo de las 9:30 de la mañana, los integrantes del FAM ofrecieron una conferencia de prensa en el quiosco de la capital para denunciar la represión de que fueron objeto e insistir en que esa no era la vía para solucionar los conflictos, sobre todo porque este día se espera una reunión de trabajo en la Secretaría de Gobernación.
En la conferencia de prensa, cada uno de los sectores que integran el FAM como transportistas, la UAEM, sindicatos, Movimiento Magisterial de Bases, Pueblos de Morelos, artesanas y otros, presentaron sus denuncias en relación a lo que han registrado en los últimos 15 días desde la marcha de protesta hasta el plantón.
Fue ahí donde el rector de la Universidad Autónoma del Estado de Morelos (UAEM), Alejandro Vera Jiménez, responsabilizó al gobierno estatal de no liberar recursos económicos por más de 400 millones de pesos que requiere la Casa de Estudios para su operatividad y de haber iniciado una campaña de denostación y desprestigio contra la institución.
Javier Sicilia anunció que las acciones seguirían y pidió a los representantes de los medios de comunicación ser testigos de cómo se retomaban los pasillos de Palacio de Gobierno, resguardado por un pequeño grupo de elementos policiacos.
Sicilia se dice golpeado;
en la Cruz Roja dice que no
Inmediatamente se trasladó a Palacio de Gobierno, que tenía vallas de protección y atrás de ellas elementos del Mando Único con sus toletes y escudos de seguridad, mismos que el grupo de inconformes retiró a la fuerza para reincorporarse a los pasillos que hasta la madrugada de ayer tenían bajo su control.
En ese lapso, el poeta Javier Sicilia, quien llegó en medio de empujones de policías pero e inconformes, denunció haber sido golpeado en las costillas, además de no poder respirar bien, lo que obligó a llamar a una ambulancia, que lo trasladó a la Cruz Roja para su valoración y donde se le dio de alta de manera inmediata.
Esta situación generó el enojo de los grupos de protesta, que gritaban en los pasillos haber sido víctimas de la represión y exigían una vez más la salida de Graco Ramírez.
Durante la tarde, por los accesos de la calle Galeana, elementos del Mando Único ingresaron a Palacio de Gobierno, encabezados por Javier Viruete, subsecretario Operativo de Seguridad, y llegaron a la entrada principal del Palacio de Gobierno, donde dialogaron con Guillermo Ruvalcaba, quien fungió como interlocutor y calmó los ánimos de la gente, llegando al acuerde de reinstalar el plantón en uno de los pasillos de la Casa Morelos.
De manera pacífica, se quitaron las vallas y la gente se trasladó al espacio designado, en donde volvieron a colocar sus pancartas para seguir con su lucha.
Para atestiguar los hechos, personal de la Comisión Estatal y Nacional de Derechos Humanos llegò al lugar y tomó evidencias de lo acontecido.
Por la tarde de ayer, los elementos del Mando Único de nueva cuenta retiraron a los manifestantes de su plantón, a quienes no les quedó más que instalarse en la calle para después quitarse y abrir la circulación, siempre resguardados por los agentes del grupo antimotines.