En dos impugnaciones ante el Tribunal Electoral, presentadas en la última semana, AMLO insiste en que ejerce su libertad de expresión la cual, considera, no puede ser "objeto de ninguna inquisición judicial o administrativa".
Estos recursos impugnan las resoluciones de la Comisión de Quejas del INE del 13 y 20 de junio, en las que le ordenaron no volver a hablar sobre el proceso electoral de 2024, de los procesos internos de los partidos ni de ningún aspirante a la Presidencia.
En sus recursos, AMLO afirma que sus dichos son producto de respuestas a la prensa y que el Tribunal Electoral ha dicho que las conferencias o entrevistas no pueden medirse igual, porque son respuestas "espontáneas", no de un "guión predeterminado" que no vulneran el principio de equidad electoral, pues todavía no hay precandidatos ni candidatos inscritos.
"Las manifestaciones del Presidente hacen referencia a procesos intrapartidiarios que de ninguna manera pueden constituir llamados a votar a favor o en contra de alguna fuerza política", se argumenta.