A una semana de que el conflicto entre Israel y Palestina arreciara, dejando a su paso cientos de muertos y miles de heridos, el mundo se encuentra en tensión y polarizado. Antes de que escale más, se prevé que el Consejo de Seguridad de la ONU impulse el diálogoMañana se cumple una semana de que inició la ola de violencia en Israel por los ataques e invasión del grupo terrorista Hamás y, a su vez, la respuesta más violenta del gobierno israelí contra los palestinos.
Después de que se registraron los primeros bombardeos en territorio israelí, Benjamin Netanyahu, primer ministro de aquel país, advirtió que “el enemigo” pagaría un precio caro por sus acciones, y cumplió mandando más misiles a Gaza, asesinado e hiriendo a miles de personas.
De acuerdo con datos del Estado de Israel, al día de ayer la cifra de muertos ascendía a mil 300 y los heridos a más de 3 mil. Del lado de los palestinos, las personas sin vida llegaron a mil 537 y los heridos a 6 mil.
A diferencia de Israel, Gaza continúa sin luz, agua y combustible debido a una orden emitida por el gobierno de Netanyahu. Yisrael Katz, ministro de Energía de Israel, confirmó que los suministros no volverían hasta que los secuestrados israelíes regresaran a casa.
A través de videos e imágenes compartidas en redes sociales se han dado a conocer las historias y fotografías de quienes han desaparecido en Israel desde la llegada de Hamás. Como el caso de Noa, una joven que ayer cumplió 26 años y de quien no se sabe su paradero tras su asistencia a un festival de música.
En la Franja de Gaza, donde Israel envía misiles y a sus militares en busca de integrantes de Hamás, la muerte y los desaparecidos también han estado presentes. Ayer, por ejemplo, el Ministerio del Interior de Gaza informó la muerte de al menos 45 palestinos luego de que fueron asesinados tras un ataque aéreo israelí.
Ante la situación de violencia en Medio Oriente, mientras que la Organización de las Naciones Unidas (ONU) llamó a una junta de emergencia para hoy por la mañana, representantes internacionales han respaldado a Israel y su derecho de defenderse.
Estados Unidos, Canadá y Reino Unido, por mencionar algunos, defienden la postura israelí, aunque países como México se han posicionado en favor de un diálogo entre ambas partes.
Independientemente de la posición de cada Estado, diversos gobiernos han enviado vuelos a Israel para recoger a sus connacionales y llevarlos a su país de origen, entre ellos Reino Unido, Colombia, México y Estados Unidos.
Por su parte, Francia se ha unido a la lista de naciones que han perdido a algunos de sus ciudadanos por los ataques en Israel. De acuerdo con el presidente Emmanuel Macron, hasta el día de ayer se registraron 17 franceses, entre niños y adultos, desaparecidos y 14 muertos.
Riesgos internacionales
La situación de violencia en Israel y Palestina se ha robado los reflectores no solo por la crisis social, sino por los retos internacionales que podría traer consigo.
Con la invasión de Rusia a Ucrania, por ejemplo, la cual lleva dos años y medio vigente, la guerra ocasionó que los precios del combustible y el gas aumentaran, sobre todo en países europeos que dependían de los energéticos rusos.
Con esa crisis energética en Europa, la inflación que ya había aumentado por la pandemia del COVID-19 volvió a repuntar, convirtiéndose en uno de los mayores retos de potencias como Estados Unidos.
Además, Ucrania dejó de ser uno de los principales productores y exportadores de maíz, trigo y cebada, lo que provocó que se registrara una escasez en los productos de esas semillas en la región.
En el caso de Israel y Hamás, el doctor Francisco Daniel Abundis Mejía, especialista en Medio Oriente, opina que aunque siempre que acontece un conflicto de gran escala a nivel mundial se tiende a pensar en las consecuencias económicas, la situación entre los israelíes y el grupo palestino todavía es mucho más regional que internacional.
“En su momento el conflicto palestinos-israelíes generó una repercusión muy grande, particularmente en 1973 cuando se da la guerra de Yom Kipur y la Organización de Países Exportadores de Petróleo baja la producción de petróleo en favor de la narrativa palestina (…) Esto llevó a una crisis sin precedentes.
“Me parece que actualmente no estamos en esa perspectiva porque esta no es una guerra entre Israel y el pueblo palestino, sino entre Israel y Hamás”, dice el especialista.
Asimismo, asegura que debido a que el conflicto actual está focalizado en Gaza, no va a escalar a otros puntos de Israel al menos en este momento.
Por su parte, el doctor Tomás Milton Muñoz Bravo, de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales (FCPyS) de UNAM, afirma que aunque con la situación de violencia en Israel y Gaza ya se están viendo algunas afectaciones en las bolsas de valores internacionales y se podría dar un posible incremento en los combustibles fósiles, no podría hablarse de una escalada mayor siempre y cuando no se involucren a otros gobiernos.
Irán, por ejemplo, ha estado en la mira por su presunto respaldo a Hamás en el ataque a Israel; un acto que si se comprueba, el conflicto escalaría mucho más.
“Con esto estarían en duda algunos procesos que ya se habían iniciado. Por ejemplo, en el caso de Arabia Saudita que ya tenía acercamientos con el gobierno de Irán, si se comprueba que apoyó directamente a Hamás para desarrollar estos ataques en contra de Israel, se rompería ese tipo de alianzas que ya se estaban gestando y que estaban dando cierta estabilidad en la región”, dice Muñoz Bravo.
La misión de la ONU
A casi una semana de que se reportara una escalada de violencia en Medio Oriente, la Organización de las Naciones Unidas ordenó una junta de emergencia esta mañana para hablar al respecto.
Según la página oficial de la organización, la sesión del Consejo de Seguridad comenzará a las 10:00 (hora Nueva York) y concluirá cinco horas después.
Aunque al cierre de esta edición no se dieron a conocer los temas que abordarán los países participantes, las declaraciones del secretario general, António Guterres, insinuaron que podrían enfocarse en abrir las vías de tránsito en Gaza para permitir la entrada de víveres.
“Se debe permitir la entrada a Gaza de suministros cruciales para salvar vidas, incluidos combustible, alimentos y agua. Necesitamos un acceso humanitario rápido y sin obstáculos ahora”, compartió Guterres.
En entrevista, el doctor Tomás Milton Muñoz Bravo puntualiza que además de abrir canales que permitan enviar ayuda humanitaria a Gaza, otro de los temas que no deberían faltar en la junta del Consejo de Seguridad es el intentar detener lo más pronto posible la violencia registrada.
Del mismo modo, sugiere que se hable de la importancia de entablar negociaciones entre ambas partes y garantizar que se atienda el problema de las personas que han sido desplazadas en Gaza como medida de seguridad.
Según datos de la Agencia de la ONU para refugiados palestinos, al día de ayer se registró que al menos 340 mil palestinos han sido desplazados desde que comenzó la violencia el pasado sábado, y que casi 220 mil personas se encuentran refugiadas en 92 escuelas de la organización no gubernamental.
A pesar del respaldo que la organización le da las personas más necesitadas con un techo para protegerse de los bombardeos, ayer informó que al menos 21 de sus instalaciones han quedado afectadas por la situación de violencia.
“Las escuelas y otras infraestructuras civiles, incluidas aquellas que albergan familias desplazadas, nunca deben ser atacadas”, sentenció la agencia.
Ana Luisa Trujillo, internacionalista y docente de la FCPyS de la UNAM, comparte que otro rubro que no debería faltar en la junta del Consejo de Seguridad es el reconocimiento a Palestina como una comunidad que necesita reconocimiento político.
“Se le debe reconocer para que, como al Estado de Israel, le presten la atención debida y se reconozcan sus derechos como se espera”, dice Trujillo.
Medidas contra Israel
Aunque el reciente conflicto en Medio Oriente lo comenzó Hamás con el lanzamiento de cohetes desde Gaza, existe un historial de conflictos entre Israel y Palestina a lo largo de décadas.
De acuerdo con Amnistía Internacional, desde su creación en 1948, Israel ha creado y mantenido con sus continuos gobiernos un sistema de leyes, políticas y prácticas para “oprimir y dominar” a los palestinos.
“Este sistema se manifiesta de diferentes formas en las diversas zonas en las que Israel ejerce el control sobre los derechos de la población palestina, pero la intención es siempre la misma: privilegiar a la población israelí judía a expensas de la palestina”, remarca la organización humanitaria.
Ha sido a través de la privación de derechos económicos y sociales, de segregación y control, y de desposesión de tierra y propiedades, que Israel ha actuado contra los palestinos, según especifica Amnistía Internacional.
Además, desde 2007 el gobierno israelí ha impuesto a Gaza un bloqueo aéreo, terrestre y marítimo que castiga colectivamente a toda su población.
Con ese accionar, la organización sostiene que con el tiempo el trato de Israel a los palestinos se ha reconocido internacionalmente, y de manera más amplia, como “segregación racial”.
Al respecto, el doctor Francisco Daniel Abundis Mejía indica que mientras no se sancione a Israel por el abuso que ha cometido desde su creación, difícilmente se podrá generar un cambio en la región.
“Si queremos que estos dos pueblos puedan alcanzar a construir una paz, y esta sea duradera, lo primero que se tendría que poner sobre la mesa es un acuerdo que considere las legitimas inspiraciones del pueblo palestino a la autodeterminación.
“Israel no ha cumplido ni el 4 por ciento de las resoluciones impulsadas por las Naciones Unidas, ha violentado la Corte Penal Internacional y el Convenio de Ginebra (…) Cuando se hable de las sanciones al Estado de Israel, creo que después se podría pensar en los movimientos de crimen hacia la sociedad israelí”, indica el especialista en Medio Oriente y también académico del Tecnológico de Monterrey.