La forma en la que fue excluida la Senadora Lucy Meza de la encuesta de Morena para definir a él o la candidata a la gubernatura del estado de Morelos ha generado la indignación de distintos sectores de la población, ante lo que prevén una imposición antidemocrática.
A pesar de encabezar las preferencias ciudadanas, de ser considerada la segunda mujer más competitiva a nivel nacional y no obstante a que dobletea en la intensión del voto a cualquiera aspirante de Morelos, La Senadora Lucy Meza fue víctima del peor desaseo político, sin precedente alguno.
Esta imposición no sólo fractura y divide a Morena en Morelos, sino que también pone en riesgo al movimiento de Andrés Manuel López Obrador y de Claudia Sheinbaum, de perder las elecciones en el 2024 en Morelos.
Acusar a Lucy Meza de tener relaciones con el Fiscal del Estado de Morelos, es una justificación insuficiente para excluirla de la competencia por la gubernatura en Morelos, sobre todo, frente a los visibles vínculos del gobernador, Cuauhtémoc Blanco con lideres de los carteles del narcotráfico o ante la protección que diputados de Morena le otorgan al Fiscal Uriel Carmona.
La imposición venga de donde venga, está propiciando enojo social de propios y extraños, por la violencia política y de género que se está generando en contra de Lucy Meza, en un partido o movimiento que se dice demócrata, inclusivo y paritario.
La indignación social que se está gestando por esta acción de violencia política, podría ser capitalizado para la decisión y definición que en los próximos días pudiera asumir la Senadora Lucy Meza.
Las muestras de solidaridad hacia Lucy Meza a través de las redes sociales empiezan a tejer un movimiento en su favor, que pocos en Morelos han logrado construir. Si Lucy Meza define competir por algún otro partido, alianza, movimiento social o de manera independiente, será una candidata fuerte a la gubernatura de Morelos.
Si bien es posible que los órganos internos de Morena modifiquen o se desistan de la imposición que pretenden perpetrar en Morelos, También es cierto que su mejor candidata, con la que podrían haber garantizado carro
completo en Morelos, se convierta en la postulante del honor y orgullo morelense.
Lucy Meza no ha perdido, por el contrario, la violencia política que se ha ejercido en su contra será el sentimiento de las y los morelenses de defenderla y llevarla a la gubernatura.
Las huestes de Morena le están haciendo a Lucy Meza, lo que le hicieron a Andrés Manuel López Obrador en el 2005 con el intento de desafuero y en el 2006 con el fraude electoral. Es decir, están convirtiendo a Lucy Meza en una mártir política.