Lo que durante casi dos décadas fue el Centro de Distribución de Liverpool, la cadena de tiendas departamentales, está a punto de convertirse en la sede de la “farmacia central” en la que el Gobierno de Andrés Manuel López Obrador busca tener disponibilidades de todos los medicamentos del mundo. Se trata de un almacén en un terreno de más de 42 hectáreas ubicado en el kilómetro 5 de la carretera Jorobas-Tula, en el municipio de Huehuetoca, Estado de México, en cuya fachada aún se aprecian, cada vez más difusos, los colores rosa y blanco que distinguen a la marca de tiendas departamentales. La dirección donde el Gobierno busca instalar la “superfarmacia” —que oficialmente se llamará Centro Federal de Almacenamiento y Distribución de Insumos para la Salud (Cefedis)— consta en documentos de licitaciones publicados en el portal de la Secretaría de Hacienda. Dentro del terreno hay dos naves industriales de 94.000 metros cuadrados y decenas de puntos de embarque desocupados. El nuevo Cefedis, definido por López Obrador como “la farmacia más grande del mundo”, tendrá el doble del tamaño que el almacén más grande de Amazon en México, localizado en Tepotzotlán, también en Estado de México.
La farmacia central será operada por Birmex, la empresa paraestatal de producción de biológicos y distribución de medicinas. Habitantes de Santa Teresa, el barrio popular y cuasi rural donde está localizado el almacén, afirman que Liverpool desocupó sus instalaciones desde finales de 2022, aunque no conocen las razones. Este periódico contactó a la empresa a través su agencia de relaciones públicas para consultarle sobre los motivos de la venta, pero no se recibió respuesta. A través del enrejado se aprecian los almacenes desérticos. A pesar de la desocupación, las áreas verdes están cuidadas, y las instalaciones, limpias. Guardias de una empresa de seguridad privada auxiliados por un sistema de circuito cerrado impiden el paso a las vialidades del inmueble (en el acceso un letrero avisa de que allí comienza una propiedad privada). Un auto de la policía estatal mexiquense patrulla los alrededores.
El Gobierno federal ha estimado un presupuesto de 1.400 millones de pesos para la adquisición del almacén. El contrato de compraventa con Liverpool está por cerrarse, según ha confirmado una fuente de la Presidencia de la República a este diario. La Administración de López Obrador además prevé una inversión de 390 millones de pesos para rehabilitar y adecuar las naves industriales, y de otros 850 millones para la adquisición de sistemas de seguridad y protección civil, cámaras frías, áreas de embarque y recibo, líneas de preparación de pedidos (picking), una unidad robot, montacargas y vehículos de transporte interno, según información publicada por diversos medios. El proyecto de inversión estima un costo de operación y mantenimiento de 305 millones de pesos anuales.
Birmex ha señalado que contar con un almacén central servirá para dejar de pagar el arrendamiento de las cinco bodegas con que cuenta actualmente en el Estado de México. Además, se concentrarían los servicios de almacenamiento y preparación de pedidos que presta la paraestatal al ISSSTE y el IMSS, y se lograría una reducción de costos y mayor eficiencia en la distribución de medicamentos. Actualmente, en las cinco bodegas arrendadas se tienen 85.300 posiciones para el almacenamiento de medicinas; el Gobierno espera contar en la “farmacia central” con 90.000 posiciones para resguardar medicamentos de la red seca, fría y controlada.
El nuevo almacén de Cefedis se ubica en los límites del Estado de México y el Estado de Hidalgo. López Obrador ha afirmado que el sitio elegido es estratégico por su cercanía con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), a 45 minutos de distancia en auto desde ese punto. El presidente ha anunciado que quiere inaugurar el Cefedis en diciembre, junto con otras obras prioritarias, a 10 meses de que concluya su sexenio. López Obrador ideó en agosto la “superfarmacia” como una solución al problema de desabasto de medicamentos en los centros de salud mexicanos, principalmente en las zonas rurales, uno de los puntos flacos de la política de salud pública implementada por su Administración.
Originalmente había propuesto que el almacén estuviera localizado en Ciudad de México y que en él hubiera “todas las medicinas del mundo, en cantidades razonables”. Según el plan concebido por el presidente, cuando un centro hospitalario de cualquier parte del país reporte al Gobierno federal la falta de una medicina, se movilizará una maquinaria logística terrestre y aérea para hacérselo llegar en menos de un día. “Si falta un medicamento en una comunidad, en un pueblo, en un municipio, en un Estado, sea un centro de salud o un hospital, que en 24 horas se tenga el medicamento, porque van a estar todos los medicamentos que se utilizan para atender todas las enfermedades”, ha informado López Obrador en su conferencia mañanera.
El Gobierno da por sentada la transacción con los propietarios del almacén en Huehuetoca. Liverpool inauguró en 2005 su Centro de Distribución y lo definió como “el más grande de Latinoamérica”. El espacio fue cerrado en 2022, cuando la empresa mudó sus operaciones a la Plataforma Logística Arco Norte, en Jilotepec, Estado de México. La maniobra le permitió triplicar su capacidad de almacenamiento y distribución de mercancías respecto de la bodega de Huehuetoca, según dijo un directivo de Liverpool a Expansión en octubre de 2022. Ya desde entonces, la empresa tenía planes de poner en arrendamiento el almacén de Huehuetoca. El horizonte es aún mejor. Ha llegado un decidido comprador.