Días antes de asumir la Presidencia de México en 2018, Andrés Manuel López Obrador (AMLO) aseguró que no se derribaría ni un solo árbol para la construcción del Tren Maya. Sin embargo, en la actualidad, se tiene constancia de que millones de árboles han resultado afectados por este megaproyecto.

Hasta el momento, no existe un número oficial de cuántos árboles han sido talados o reubicados para completar las vías del tren; sin embargo, existen varias estimaciones que pueden dar una idea del impacto ambiental de la obra.

En febrero de 2023, el medio Animal Político obtuvo una respuesta del Gobierno de México sobre la tala que han requerido varios tramos del proyecto que promete traer progreso y mejorar la calidad de vida del sureste mexicano.

Por medio de una solicitud de información, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur) informó que hasta ese momento se tenía registro de que 3 millones 444 mil árboles habían sido talados o removidos durante las obras del famoso tren del presidente López Obrador.

Ambientalistas denuncian ‘asesinato’ de 10 millones de árboles

Una estimación más reciente y de mayores proporciones indica que al menos 10 millones de árboles habrían resultado afectados, según declaraciones de ambientalistas a la agencia de noticias EFE en octubre de 2023.

“Hemos estado luchando todo este tiempo y, sin embargo, hasta ahora no logramos salvar este fragmento de selva que se tiró. Calculamos que se ‘asesinaron’ más de 10 millones de árboles de una de las selvas saludables que nos quedan en México”, explicó Roberto Rojo, miembro de la organización Sélvame del Tren en Quintana Roo.

El Gobierno de AMLO no ha confirmado ni desmentido esta alarmante cifra. Aunque le fue mencionada a María Luisa Albores González, secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales, durante su comparecencia en la Cámara de Diputados del pasado 2 de diciembre, la funcionaria no emitió comentarios al respecto.

¿Por qué AMLO rompió su promesa de no tirar árboles?

Pero ¿qué llevó al presidente López Obrador a romper su promesa de no derribar ni un solo árbol? La respuesta es el cambio de ruta, ya que el trazado original no tenía previsto adentrarse en ciertas áreas de abundante vegetación.

Fue en enero de 2022 que el Gobierno anunció los cambios en la ruta para el Tramo 5, que originalmente estaba previsto que corriera sobre la Carretera Federal 307 Cancún-Chetumal, es decir, sobre una zona ya impactada.

No obstante, la ruta original mantenía inconforme al sector empresarial, por las posibles afectaciones de obras a turistas, según lo hicieron saber en un comunicado emitido desde noviembre de 2021.

Mientras tanto, en junio de 2022, el Fondo Nacional de Fomento al Turismo admitió que la modificación del trazado del Tramo 5 Sur se debió a consideraciones económicas.

No se quería afectar a hoteleros

Efraín Olivares, gerente del Fonatur Tren Maya, explicó que la decisión de trasladar las vías, que originalmente cruzaban la carretera 307 frente a los hoteles de la Riviera Maya, a una zona selvática, se tomó para evitar afectar la actividad turística.

Esta elección se hizo incluso después de que las obras ya hubieran comenzado y se hubieran desmantelado miles de árboles. Olivares mencionó que fue una decisión basada en intereses económicos para no perjudicar a los hoteleros ni al turismo.

Estas declaraciones se realizaron durante una reunión informativa sobre la Manifestación de Impacto Ambiental (MIA) del tramo de 67.7 kilómetros, que conecta Playa del Carmen y Tulum, llevada a cabo en la casa ejidal Jacinto Pat en Tulum, Quintana Roo.

A través de las redes sociales, se han difundido imágenes que muestran extensas áreas de vegetación deforestadas debido al paso de la maquinaria. Incluso, una de estas fotografías, tomada por el mexicano Fernando Constantino Martínez Belmar, fue galardonada con el premio de Fotografía Salvaje del Año en la categoría de fotoperiodismo.

Gobierno asegura que Tren Maya protege el ambiente

A lo largo de los meses, el presidente López Obrador y su Gobierno han justificado estas acciones señalando que todos los árboles afectados serán reforestados con el programa Sembrando Vida y se ha procurado que el Tren Maya tenga el menor impacto posible a la flora y fauna del sureste mexicano.

En su más reciente comparecencia ante la Cámara de Diputados, la titular de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat) afirmó que el Tren Maya cumple con todas las leyes ambientales y se preocupa por la protección del medio ambiente.

Destacó que este proyecto cuenta con más de 500 pasos de fauna, siendo la obra con mayor cantidad en todo el país, lo que contribuye a la reconexión de ecosistemas y garantiza la preservación de nuevas áreas en la región.

Además, mencionó que en los 167 ejidos por donde pasa el Tren Maya se implementa el programa Sembrando Vida, que implica acciones directas de reforestación en el territorio.

El Gobierno ha señalado que el Tren Maya contribuirá a la reducción de emisiones contaminantes, ya que se espera que muchas personas dejen de utilizar automóviles para optar por el transporte en trenes eléctricos, generando así un impacto directo en el medio ambiente.

Por su parte, los grupos ambientalistas señalan que el verdadero impacto ambiental del Tren Maya se manifestará en unos años, ya que consideran que el daño causado a la selva es irreversible.