La disponibilidad de agua y su manejo es un factor cada vez más urgente en la gestión urbana en el País.
En el reporte Índice de Competitividad Urbana (ICU) 2023, presentado ayer, señala que las ciudades del País consumen en promedio 114.8 metros cúbicos (104,800 litros) de agua por habitante al año.
Sin embargo, la cifra se eleva a 304 metros cúbicos en el caso de Campeche y a 275 en el de Mazatlán, y se reduce a sólo 19.2 metros cúbicos en Monterrey y a 18.8 en Xalapa.
La proporción de hogares que se abastece por medio de pipas pasó a nivel nacional de 1.1 a 2 por ciento.
"Los retos en materia hídrica se agravarán con los efectos del cambio climático, por lo que invertir en la infraestructura necesaria puede ser determinante en el futuro cercano", alerta el reporte del Instituto Mexicano para la Competitividad (IMCO).
"Por ende, un enfoque sostenible en el desarrollo y crecimiento de las áreas urbanas podría tener un efecto considerable en la inversión y la atracción de talento en las ciudades en el mediano y largo plazo".