El priista Matías Nazario Morales confió en que ese cambio vendrá a oxigenar la administración de Enrique Peña Nieto y reactivará la relación con el Congreso previo a la discusión presupuestal.
Por su parte, la perredista Lucía Meza Guzmán lamentó que deje las finanzas del país en medio de las peor crisis financiera y económica.
Entrevistados por separado, la legisladora por Cuautla asumió una postura crítica, mientras el priista advirtió que el relevo era una facultad del presidente y si consideró hacerlo, fue para reforzar su política económica.
Para Meza Guzmán, los cambios en el gabinete de Peña Nieto responden más a una fallida política exterior que al reconocimiento de que las cosas se están haciendo mal en el Poder Ejecutivo.
Dijo que la salida por la "puerta chica" de Videgaray, considerado el "hombre fuerte" del gobierno priista de Peña Nieto, es vergonzosa ya que tiene que ver con el ridículo internacional al que fue sometido el presidente de México, tras haber invitado y recibido de forma innecesaria al candidato republicano a la Presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump.
Como secretaria de la Comisión de Hacienda y Cuenta Pública, destacó que la llegada de José Antonio Meade a la titularidad de la Secretaría de Hacienda representa un enroque más al que "nos tiene acostumbrados el presidente".
Será complicado -reconoció- que el nuevo secretario pueda resolver de fondo el sinúmero de problemas que enfrenta el país, sobre todo ante la coyuntura de análisis del paquete económico del 2017, tiçoda vez que mostró incapacidad para conducir las políticas de desarrollo social desde la Sedesol.
Oxigena al gabinete: Matías Nazario
Por su parte, Matías Nazario consideró que la llegada de José Antonio Meade oxigena al gobierno federal y es que reconoció que el ejercicio del poder desgasta, y en este caso "creo que la decisión del presidente es muy positiva, oxigenar y dar frescura a su equipo, con personas que vayan al relevo en un área que requiere de enorme responsabilidad y sensibilidad, sobre todo en la atención de los grupos vulnerables y llevar el tema financiero es de mucho trabajo.
Una persona como José Antonio Meade sabrá hacerlo al estar calificada y reconocida, lo que le dará un valor agregado a una buena administración".
El priista evitó señalar si es necesario considerar un cambio en la política financiera porque eso lo decidirá el presidente y el propio secretario.
Sin embargo, sí "oxigena políticamente al presidente y le da una frescura que permite tener un manejo más sólido y de mayores resultados para los ciudadanos".
Matías Nazario confió que, ante la proximidad de la discusión presupuestal, la llegada de Meade significará menos jaloneos en virtud de algunas tensiones que existían con diputados de otras bancadas, que incluso estaban solicitando la comparecencia del hoy ex funcionario y porque el hoy titular de Hacienda ha estado sirviendo al gobierno federal en cuatro sexenios, sin importar el color del partido que gobierna.