Más de 50 familias viven en la zona de riesgo de la colonia Los Pilares, de Cuernavaca, las cuales se encuentran vulnerables a un nuevo derrumbe en el paredón del Panteón de la Paz, por lo que habitantes exigieron a la autoridad municipal actuar de manera rápida y oportuna en la estabilización del talud. 
Debido a lo ocurrido el pasado 14 de septiembre del 2022, cuando un derrumbe en el paredón del panteón de La Paz destruyó casas y sepultó entre escombros a tres mujeres, los vecinos de esta zona continúan en riesgo, pues expresaron que es el único patrimonio que tienen para vivir. 
El señor Juan Rangel Díaz, uno de los pobladores que en el año 2022 perdió todo su patrimonio tras el colapso del paredón, aseguró que durante estos casi dos años no han recibido ayuda o recursos por parte del Ayuntamiento de Cuernavaca, a cargo del alcalde José Luis Urióstegui Salgado.
Rangel Díaz manifestó que el único acercamiento que ha tenido la autoridad municipal ha sido para recomendarles desalojar el área, sin darles alguna alternativa de vivienda digna, por lo que señaló que al menos el municipio debe apresurar los trabajos en el panteón de la Paz y reforzar la parte del terreno que amenaza con desprenderse y volver a generar otra desgracia.
Los pobladores también manifestaron que lamentablemente no pueden dejar sus viviendas, porque es el único patrimonio y techo que tienen para vivir, por lo que pidieron ser comprendidos y no ser señalados como los presuntos culpables de las desgracias ocurridas. 
“El Ayuntamiento no entiende que sólo tenemos este pedazo de tierra para vivir. Ellos nos piden desalojar, pero en ningún momento vinieron a ayudarnos, ni para quitar el escombro de nuestras casas”, expresó Rangel Díaz.
Durante esta temporada de lluvias, los pobladores de esta zona aseguraron que se han registrado deslaves ligeros y desprendimientos de material de dicho paredón, lo que les preocupa cada vez más. 

Comparativa

Tras casi dos años del derrumbe en la colonia Los Pilares de Cuernavaca, vecinos aseguraron que sólo han tenido una junta con el Ayuntamiento, para tocar el tema, y fue antes del periodo electoral.
Incluso aseguran que se han escuchado ligeros desprendimientos, y se logra ver una fuga de agua en la casa que quedó sepultada bajo los escombros.
En un recorrido que hizo ayer Diario de Morelos se puede ver que el paredón está prácticamente igual que en mayo del año pasado y que hay tumbas que siguen estando a punto de colapsar.

Salvador Rosas /  salvador.rosas@diariodemorelos.com