"Nosotros seguiremos la lucha de exigir lo que a ley nos corresponde. No hacemos guardia, pero los pocos que somos aquí seguimos y nos cooperamos para comer y seguir a la espera de una respuesta a nuestras peticiones", apuntó Juan Solano.
Precisó que ya han cumplido 70 días de plantón y la mesa de diálogo sigue varada, que "se ve que ni a Graco ni a los diputados les importa nuestra situación como ex trabajadores de los tres Poderes del Estado que por más de dos décadas dimos todo (...) los tiempos han cambiado y necesitamos de nuestros ahorros".
El entrevistado señaló que en total son dos mil 500 jubilados y pensionados los que protestan. Por otro lado, la también inconforme Consuelo Pérez dijo que de los tres Poderes, los del sindicato del Ayuntamiento de Cuernavaca activos, así como jubilados y pensionados, hacen una fuerza doce mil protestantes.
Por otra parte, Tito Ocampo precisó: "No es posible que de la noche a la mañana se quiera hacer desaparecer el legado del doctor Lauro Ortega Martínez, como fue el Instituto de Crédito para los Trabajadores del Gobierno del Estado. La nueva ley que rige, afectaría a jubilados, pensionados y desde luego a los activos".
El grupo de manifestantes dijo que sus líderes, así como la Asociación de Jubilados y Pensionados Administrativos del Gobierno del Estado, siguen con la lucha para que el Gobierno y diputados los escuchen, ya que no piden más que respeto a sus derechos laborales, a su antigüedad.
Mientras tanto, las guardias en el Congreso continúan; es preciso mencionar que varios de ellos trabajan en tiendas comerciales y las mujeres sobreviven con la venta de productos de belleza.